Sin freno desaparición de mujeres en Izúcar, ahora buscan a Mar Contreras

“El teléfono de mi mamá dejó de sonar y posteriormente nos mandó a buzón de voz”, relata el hijo de la víctima

Armando Tlatelpa | El Sol de Puebla

  · miércoles 27 de enero de 2021

Foto: Cortesía

Izúcar de Matamoros.- La desaparición de mujeres y levantones van aumentado en la región de Izúcar de Matamoros, el último caso ocurrió la tarde de este martes 26 de enero cuando no se supo más de Mar Contreras Leal de quien tras salid de su domicilio, cerca de las 15:00 horas, se perdió todo contacto con ella.

A través de redes sociales su hijo, Jason Leal pidió ayuda a través de las redes sociales para localizar a su mamá.

“El teléfono de mi mamá dejó de sonar y posteriormente nos mandó a buzón de voz, no sabemos nada de ella y no hubo ninguna discusión que amerita a este percance”, señaló.

Informó que en su momento de la desaparición vestía un pantalón de mezclilla azul claro, sudadera gris oscura marca Adidas, gorra color negro, además de que es de piel morena, ojos rasgados color café oscuros, cabello rizado, y mide aprox. 1.65 metros de altura.

Cabe mencionar, que este caso se suma al de María Fernanda Rosete Fuentes de tan solo 16 años de edad, quien luego de salir de su domicilio ubicado en este municipio el pasado 31 de diciembre de 2020, hasta el momento no hay rastro de ella pese a que la familia se ha manifestado un par de ocasiones por calles de la ciudad y han exigido a las autoridades respuesta inmediata.

Finalmente, Jason pidió la colaboración de la población para comunicarse en dado caso de saber algo, “si alguien la vio por última vez en el centro de Izúcar de Matamoros o saben de su paradero, comunicarse por medio redes sociales o los números 4368808 o al 2431166874.

Cabe mencionar que, este fin de semana, al menos cinco mujeres y con diferencia de horarios denunciaron a través de redes sociales intento de “levantones” que presuntamente sucedieron en calles céntricas del municipio de Izúcar de Matamoros, por lo que pidieron el apoyo de los establecimientos que se encuentran abiertos para resguardarse en caso de estar en peligro y el uso del silbato.

Las jóvenes de entre 18 a 25 años, narraron para este corresponsal su historia, destacaron que el hecho se dio aprovechando el cierre de locales tras la contingencia sanitaria de Covid-19 y por la poca afluencia de habitantes.