Un nuevo centro comercial denominado “Los Portales” es construido dese hace varias semanas a un costado del palacio municipal de Teziutlán, el cual de acuerdo con el “Frente Ciudadano Teziuteco”, carece de los permisos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), además de que las obras se encuentran en un espacio que en el pasado era una calle.
Al inicio del presente gobierno municipal fue anunciado el proyecto de remodelación del mercado Techumbre, que comprende la construcción de 80 locales comerciales y estacionamientos, en el que serán colocados los comerciantes.
Ante tal situación, un grupo de inconformes enviaron un documento a la delegación de la Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), solicitando su intervención, debido a que la autoridad municipal pretendía llevar a cabo acciones, dentro de un espacio que data del siglo XIX, lo que consideraron que es motivo de clausura de dicho proyecto.
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Por tal motivo, Carlos Peredo fue llamado por la delegación de esta dependencia, para solicitarle los permisos necesarios a fin de llevar a cabo el proyecto, sin embargo, argumentó que dicho espacio fue habilitado en el año de 1943, a la par del palacio municipal, es decir, construidos en el siglo XX, hecho que fue corroborado por un perito, a quien le fue presentada la edificación.
Tras la petición presentada al INAH por los inconformes, les fue respondido el documento, asentando que “al momento no se ha recibido proyecto alguno, por parte del presidente municipal de Teziutlán, sin embargo, de ser el caso, este será valorado, conforme a la normatividad vigente, aplicada por el INAH, para la respuesta conducente en el ámbito de nuestra competencia”.
A la par, los inconformes enviaron un documento al edil Carlos Peredo, en el cual solicitaron reconsiderar la obra de remodelación del mercado, solicitando se quede despejada esta calle, permitiendo otorgar un mayor esplendor a los edificios históricos que yacen en la zona, todo ello sabedores de las necesidades de tienen los comerciantes, para expender sus productos, tomando como alternativas un segundo piso en el mercado Victoria o dentro del mercado anexo.