“Somos luchadores, no somos saqueadores”, gritan en Atlixco

Miguel Ángel Domínguez

  · sábado 7 de enero de 2017

Fotos: Miguel Ángel Domínguez

ATLIXCO, Pue.- Bajo la consigna de “somos luchadores, noprovocadores y tampoco saqueadores”, más de un centenar dehabitantes de este municipio marcharon por las principales callesde la ciudad en protesta por el aumento reciente del precio de lagasolina.

A diferencia del primer intento, el cual el lunes pasado apenasllegó a 20 participantes, la convocatoria de este sábado contócon el apoyo de automovilistas y transeúntes. Y quedó lainvitación para una tercera el próximo 14 de enero.

Durante la manifestación, apenas tres negocios bajaron cortinaspara “evitar problemas”, sin embargo, todo concluyó entranquilidad.

La protesta ocurrió en medio de un ambiente de temor ydesconfianza civil en Atlixco tras los dos complicados últimosdías.

El jueves 5 de enero ocurrió el cierre de las tiendascomerciales más importantes: Coppel, Soriana y Bodega Aurrerá poravisos en redes sociales sobre presuntos saqueos, así como eldesalojo de cientos de clientes este viernes de esta última, cercade las siete de la noche, por el lanzamiento de algunas piedras ala tienda.

La cita fue a las 9 de la mañana en el norte de la ciudad,específicamente en la gasolinera Vista Hermosa. Casi media horadespués de la hora marcada, sólo eran una decena de personas. Alas 10 de la mañana, el contingente llegó a los 50 invitados ycomenzaron a caminar hacia el centro de Atlixco. Una enorme mantade repudio a Peña Nieto, a los diputados y Senadores fue elestandarte. “No me infunden miedo, sólo ganas de defender a mipatria”, estaba escrito en una cartulina.

Ya sobre la avenida Libertad y en la antesala del zócalo, losmarchistas comenzaron a recibir las primeras muestras de apoyo ysolidaridad: aplausos, botellas de agua y gritos de aliento. Sobrela plaza pública de la ciudad, el doble de atlixquences decidieronunirse y eso extendió el recorrido hasta otro punto neurálgico:la terminal foránea de autobuses ERCO- ORO y la calle ManuelÁvila Camacho saturada de comercios y gente por el tianguis de lossábados.

Fue en ese punto donde tiendas de ropa y de teléfonoscelulares, farmacia del Ahorro, una casa de cambio y un Oxxobajaron las cortinas durante el paso de los inconformes. Ya en elzócalo, tres oradores, entre ellos un ama de casa cargando unafotografía de Emiliano Zapata, resumieron el conflicto: “losaumentos de la gasolina, la electricidad y el gas son impuestos porel gobierno porque los mexicanos protestamos poco. ¡No algasolinazo y sí a la venta del avionazo!”.

Pidieron visitar a los diputados federales y senadores, asícomo al Presidente de la República “para exigirles no aprobarmás medidas en contra del pueblo”. Y finalmente el llamado a losciudadanos a participar en las protestas, “pero sin dejarsellevar por los provocadores enviados del gobierno para saqueartiendas. Y hacen eso para tener pretextos y encarcelar a quienesmanifiestan pacíficamente inconformidades”.