Su sueño era regresar a México para casarse; el Covid-19 lo mató

Se llamaba Benito, tenía 63 años de edad y era residente de Estados Unidos

Miguel Ángel Domínguez | El Sol de Puebla

  · jueves 28 de mayo de 2020

Foto: Cortesía Familia

Después de más de cuatro décadas de vivir en los Estados Unidos, primero como migrante ilegal y luego como residente, Benito Rojas estaba planeando dos cosas para el futuro: alcanzar su pensión y regresar a Atlixco para casarse a los 63 años de edad y con su pareja de casi toda la vida. Pero hace unos días, el Covid-19 cortó de tajo todo. Hoy los familiares buscan resolver la manera de traer las cenizas desde Nueva York.

“Lamentamos informar: el señor Benito Rojas pasó a la presencia del Señor Jesucristo a las 6:46 de la tarde del día 26 de mayo del 2020 víctima de la pandemia del Covid-19 la cual afectó a la ciudad de Nueva York”, escribieron la noticia en su cuenta personal de Facebook.

Es el sexto caso confirmado por las autoridades y por los familiares de migrantes atlixquences fallecidos en la Unión Americana por la pandemia del Coronavirus. La mayoría en la zona de la llamada Urde de Hierro y en New Jersey.

Benito partió de la colonia Ahuehuete, en el centro de la ciudad, a New Jersey en busca del sueño americano rebasada apenas la adolescencia. La dirección de su casa es emblemática: clavada en la profundidad del histórico parque del mismo nombre. Junto a la banca más usada por los novios para darse cariño. “Todos los chavos del Ahuehuete jugábamos futbol en ese zoocalito”, dijo Martín, un exvecino y a quien encontró precisamente, y muchos años después, en la Unión Americana.

Primero llegó a New Jersey para estar varios años y comenzar dos carreras paralelas: la profesionalización en el ramo de la construcción y la de obtener papeles y consumar el sueño mexicano en el país del norte. ya asentado, decidió acercarse a Nueva York. Ahí vivía con algunos familiares.

A principios del 2020, este atlixquence prácticamente estaba en la antesala del futuro inmediato. Documentos americanos en la mano, había dos pendientes: llegar a la meta de la pensión en su trabajo en el norte, y la promesa de regresar a casarse a Atlixco con la novia de prácticamente toda la vida.

Foto: Cortesía Familia

Incluso la semana pasada ya en el hospital de New York logró hablar, con dificultades por el deterioro de la salud, por teléfono con ella, la mujer a quien pidió paciencia para el regreso. Y no cambió los planes sentimentales. También mandó mensajes a la hija de su prometida agradeciendo todas las experiencias mutuas. “Esto antes de entubarlo”. No logró salvarse.

Hasta el momento es un misterio saber dónde el virus del Covid 19 llegó al cuerpo en esa ciudad, el epicentro de esa enfermedad global en el norte. Hoy los únicos planes inmediatos y a futuro para Benito son cómo enviar las cenizas a Atlixco. A la colonia Ahuehuete, en los pies del cerro de San Miguel.