El cuerpo de una mujer muerta encontrado en el oeste de la mancha urbana la mañana de este jueves significa el caso número cinco con estas características de violencia en los últimos dos meses en Atlixco. De esa cifra un par son féminas cuyos datos de posible feminicidio son, para las autoridades ministeriales, una línea a seguir.
CASO UNO
La Policía local, a las 19:37 horas de este miércoles, recibió un reporte de disparos en la junta auxiliar de Santo Domingo Atoyatempan. Al acudir los elementos encontraron a una femenina lesionada en un lugar conocido como camino a la Fresnera.
“Ahí ya estaba una ambulancia y un grupo de 30 personas de la población. El presidente de la junta auxiliar dijo que un campesino platicó sobre el incidente y habló de la mujer ya tirada en el suelo”, citó la bitácora.
Paramédicos informaron que la mujer, de aproximadamente 30 años, estaba sin vida producto de tres disparos por la espalda de arma de fuego. “El médico legista y la policía Ministerial se hicieron cargo del cuerpo que ya está en el anfiteatro de Atlixco en calidad de desconocida”. Por el momento no hay detalles de las causas y cómo ocurrió el asesinato.
CASO DOS
Apenas el 29 de junio el cuerpo de un hombre sin vida apareció en una de las colonias más populares de Atlixco: La Chapulapa.
Elementos de seguridad acudieron al llamado y verifican el masculino ya no tenía signos vitales y estaba en el interior de la acequia de la zona.
El occiso vestía pantalón negro deslavado, playera gris, mochila negra y tenis negros y junto a éste había una bicicleta. Mientras vecinos aseguran “fueron a tirarlo ya muerto en la madrugada”, la dirección de seguridad pública enfocó sus baterías en un accidente vial.
CASO TRES
A mediados del mismo mes de junio en brechas correspondientes a los límites de San Miguel Ayala con San Juan Ocotepec descubrieron el cuerpo sin vida de un masculino de una edad aproximada de 30 años. Como característica particular presenta tatuajes de una posible pandilla. Tenía huellas de tortura y una herida por arma de fuego.
“Todo apunta únicamente vinieron a dejar el cadáver porque en esta zona los caminos son muy sólidos y se interconectan con carreteras que comunican a otros municipios y estados vecinos. Además, el occiso no era oriundo del municipio”, comentaron fuentes oficiales.
CASO CUATRO
A finales de mayo pasado el cuerpo semidesnudo de una mujer quedó detectado en un paraje de San Jerónimo Caleras, al oeste de la ciudad. También presentaba signos de tortura.
La fémina de apenas 27 años de edad tenía algo de ropa color negra y tenis.
La policía reportó el hallazgo de un arma de fuego, concretamente un machete, con el cual posiblemente arrancaron la vida de esta persona. La mujer acabó desecha en ácido y después olvidada en un bote.
CASO CINCO
Día 12 de junio: el cuerpo de un hombre embolsado y con tres disparos de arma de fuego estaba debajo de un puente en los límites de Atlixco con San Juan Tianguismanalco.
El caso correspondió a un hombre detectado por vecinos en la carretera a la comunidad de San Francisco Buenavista, adelante del fraccionamiento Casas GEO. Horas después el asunto estaba claro: era el cuerpo de un joven reportado como desaparecido en una unidad habitacional de la capital poblana.
Sin dejar de mencionar, en febrero pasado de igual manera una mujer resultó asesinada de un disparo en el rostro mientras llegaba a su casa en la colonia Altavista, al norte de esta mancha urbana.
La víctima tenía aproximadamente 53 años de edad. “La versión que nosotros tenemos hasta el momento es que tocan la ventana, ella abre y le disparan a quemarropa prácticamente”.