Por cuarta ocasión en esta semana, pobladores inconformes de este municipio, cerraron la carretera federal a Amozoc-Nautla y además tomaron la caseta de Payuca en la autopista Teziutlan-Virreyes. La manifestación es por falta del servicio de agua potable, pero también como medida de presión para concretar los acuerdos que fueron pactados ante la Secretaría General de Gobierno (SGG), pero que hasta el momento no han sido cumplidos.
Cabe destacar que durante el jueves, los inconformes contemplaron la posibilidad de presentar un documento, que han denominado “Pacto por la paz, civilidad y renacimiento de Cuayoaco”, mismo que anunciaron sería dado a conocer por la noche de ayer, a través del cual, prevén expresar una solución viable para terminar con el conflicto, buscando una negociación pacífica que beneficie a todos.
El pasado martes los pobladores comprometieron a Luis Carlos Migliavaca Moroy, director General de Gobierno, a dotarlos del servicio de agua potable para el día miércoles, a pesar de que resultaría imposible, puesto que no se cuenta con los aditamentos especiales que se requieren para la distribución del agua, sin embargo, ante las presiones, el funcionario se vio obligado a firmar dicho documento.
De lo anterior, sería el mismo martes por la tarde, que ante una supuesta medida de garantía, los vecinos bloquearon ambas carreteras, misma acción que tomarían el día miércoles por la mañana. No obstante, al no recibir respuesta o cumplimiento de parte de las autoridades, procedieron a cerrar ambas vialidades durante prácticamente todo el día, ya que fue hasta cerca de las 20:00 horas, que estas fueron reabiertas.
La medida fue replicada el jueves, ante la nula presentación de las autoridades tanto estatales como municipales. Los pobladores decidieron bloquear totalmente la carretera federal, mientras que en el caso de la carretera de cuota Teziutlán-Virreyes, otorgaron libre paso a los automovilistas.
No obstante, se espera que a raíz de la presentación de dicho, haya mejor apertura en torno a generar un diálogo entre los inconformes y el alcalde de este lugar, José Luis Rechy Tirado.