Una tala ilegal de árboles avanza sigilosamente en el único montículo boscoso de Santa Clara, cabecera municipal de Ocoyucan, ya que, desde las últimas dos décadas, puntos de este espacio comunal fueron lotificados para favorecer la construcción de vivienda o la venta de fracciones. Ayer, una diferencia entre comuneros, quienes son los encargados de vigilarlo, mediante un Comité, exhibió esta problemática que causa daño ecológico, pero también deja entrever una presunta disputa por el aparente control de esta tierra.
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El derribo de tres árboles, de aproximadamente 12 metros de altura, que fue ventilado vía redes sociales, alertó a las autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial de Puebla, de este problema, quienes, al acudir a la zona, colocaron sellos de clausura por la deforestación ejecutada sin los permisos correspondientes, que fue causada por intentar abrir un camino rural de tres kilómetros de longitud.
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Ayer, varios comuneros y pobladores se dieron cita en este lugar que es conocido como el cerro de Santa Clara y en diferentes momentos dejaron entrever que la pérdida de árboles causa opiniones encontradas, pero también los aparentes esquemas de repartición de los espacios, ya que favorecen a ciertos a grupos o familias.
Hay voces que están en contra de que la creación de nuevas viviendas o la venta de lotes, afecten la permanencia de los árboles. Otras expusieron que el exterminio paulatino de árboles, es presuntamente provocado para favorecer las prácticas descritas. También se escucharon comentarios que se provocan “quemas” para afectar los ejemplares.
Sobre el número de árboles que se han perdido, no hay información, ya que los habitantes reservan datos o antecedentes que permitan desde cuándo el cerro comenzó a distribuirse. Al igual, el Ayuntamiento de Ocoyucan evitó dar una información, pues ayer sólo arribaron policías municipales a la zona comunal, pero no las autoridades.
Hace tres décadas el cerro lucía repleto de árboles
Desde la autopista Puebla-Atlixco, el cerro de Santa Clara se ve lleno de vegetación por la cantidad de macizos que lo conforman, pero al aproximarse cambia el panorama por los restos de lo que alguna vez fueron ejemplares en pie.
Se sitúa a 15 minutos de distancia del zócalo de Ocoyucan y en su franja baja se observa un crecimiento habitacional que escala hacia la parte alta de forma lenta.
Para llegar a su cima sólo hay dos caminos, mismos que conecta también a las más de cien viviendas asentadas en tramos que antes tuvieron varios árboles.
A decir de algunos declarantes que pidieron el anonimato por razones obvias, la zona alta ya presenta áreas desérticas, cuando antes toda tenía vida forestal.
Muchos árboles se han cortado, ya sea porque se queman, en quemas que aparecen de la nada, aunque también hay gente que viene y corta los buenos, los verdes (…) usan hachas o motosierras, pero también hay quienes talan los que se secan y se caen solos indicaron habitantes consultados por este medio.
Los entrevistados no dieron más detalles de la tala furtiva que acontece, pero expusieron que hay otros factores que están llevando a que este cerro sufra dicho daño ambiental, uno de ellos es que un grupo de personas lo están fraccionando para fines habitacionales o de venta.
Sostuvieron, además, que este pulmón hace 30 años tenía más árboles, situación que hoy es diferente.
También recordaron cuando algunas familias encontraron restos de vestigios arqueológicos, cuando se podía escalarlo porque era del pueblo y no tenía dueños.
“Muchos nos íbamos de pinta al cerro, porque permite tener una vista panorámica del municipio, bastante espectacular”, expuso uno de los entrevistados.
El Sol de Puebla trató de recabar más información, pero hay hermetismo entre los habitantes, no obstante, en la visita se observó varias señales de esta tala ilegal que avanza de forma gradual y que recientemente fue exhibida, mediante redes sociales.
Restos de lo que alguna vez fueron árboles de pie, pueden verse conforme se recorre la reserva, que, aunque carece de vigilancia del Ayuntamiento, es custodiada por algunos vecinos, quienes de forma discreta ven la llegada de foráneos, pero evitan hablar de las condiciones de este pulmón que es devastado día con día, a cualquier hora y a la vista de autoridades municipales.
Es área comunal
Ayer, tras las diferencias que dejó entrever un grupo de pobladores de Ocoyucan y que estuvieron centradas en este cerro, se logró recabar más datos, siendo uno de ellos, que varias de sus zonas fueron repartidas y lotificadas, así como varias están en venta.
También se conoció que existe un conflicto interno entre algunos pobladores con integrantes del Comité de Comuneros de Ocoyucan, donde en éste último, supuestamente no existe rotación de los integrantes.
Por igual, se habló de que varios pobladores han tenido la iniciativa de realizar jornadas de reforestación, como una forma de apoyar este pulmón que es apreciado por algunos, por ser el único en la cabecera de Ocoyucan, un municipio que pese a tener varias reservas verdes, éstas se encuentran en riesgo de invasión, ante el crecimiento desmedido del fraccionamiento de lujo, Lomas de Angelópolis.
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