Dos innovaciones presentará el primero de tres tapetes monumentales anuales de flores el cual comenzó a instalarse desde la mañana de este lunes en la plaza pública de la ciudad.
Una: será trazado y dirigido por primera vez por una asociación de 16 productores de Cabrera, la zona floricultora por excelencia en Atlixco, quienes comercializarán en su conjunto más de 50 mil plantas.
Esa cantidad servirá de marco para un gigantesco rosal, característico de los estos trabajadores del campo y de Atlixco. “Son petunias blancas y rojas, violas, amaranto, pensamiento e hierbabuena”.
A diferencia de años anteriores, citó Laura, una de las socias, “el proveedor no será una sola persona o empresa. Y eso beneficia a muchos porque además de involucrarnos, ganamos dinero de manera equitativa”.
Y el segundo aspecto sobresaliente en este tapete, añadió la entrevistada, es la posibilidad de caminar y tomarse fotos entre el propio tapete. “Es decir, a partir de esta primavera ya no habrá escaleras para subir a un templete y desde arriba observarlo. Trazaremos un laberinto entre las flores para recorrerlo. Eso sin duda gustará a los visitantes y lugareños”.
Desde hace más de un lustro los tapetes monumentales de flores despertaron la polémica en la ciudad. Un grupo, donde está incluido el Ayuntamiento, aseguran la inversión anual de más de un millón de pesos genera una derrama económica hasta 50 por ciento más para los prestadores de servicios locales.
Y del otro lado, una corriente crítica la cual considera ese esquema un tema agitado en materia turística, y recomiendan usar ese dinero en otras causas sociales.
Anualmente son colocados tres tapetes monumentales de flores en la plaza pública de Atlixco: uno en Semana Santa, otro en verano y una más en Todos Santos.