Autoridades municipales detectaron un daño patrimonial por cerca de 200 millones de pesos, únicamente del ejercicio fiscal 2018, cometido durante el gobierno del panista Antonio Vázquez Hernández, así lo informó Jaime Cabañas Isidro, contralor municipal, tras la revisión de los documentos de obra pública, registros contables, de ingresos y egresos, erogaciones, entre otros, que fueron presentados en el proceso de entrega-recepción.
El funcionario señaló que la revisión se trata de un trámite realizado en total apego a la ley, que marca un periodo de 90 días, para examinar la documentación correspondiente al proceso de entrega-recepción, mismo que llegó a su término y dio como resultado esta serie de observaciones.
De acuerdo con lo expresado por el contralor, la investigación tuvo lugar en torno a obras inconclusas, obras no ejecutadas, obras carentes de permisos, obras pagadas, así como en contratos de constructoras, cuyos costos fueron “inflados”, así como la venta de unidades oficiales, como fue el caso de varios vehículos modelo 2018, los cuales fueron malbaratados.
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Cabañas Isidro informó que fueron detectadas firmas falsas para simular obras concluidas, las cuales fueron pagadas a las constructoras, sin haber sido terminadas y entregadas. De la misma manera, se encontraron falsificación de fianzas, para asignar obras a constructoras, lo que resulta ser una violación a la ley, entre otras asignaciones que se llevaron a cabo de forma directa.
El funcionario municipal indicó que una de las obras en las que se detectaron anomalías es la rehabilitación del Parque Recreativo El Pinal, en el que se invirtieron cerca de 3 millones de pesos, sin embargo, se habría reportado en 18 millones de pesos. Asimismo, entre las obras que fueron reportadas como concluidas, se encuentra la remodelación de la antigua estación del ferrocarril, la construcción de un inmueble en el lugar y remodelación del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Teziutlán, mismos inmuebles que no presentan ninguna acción.
Al respecto, el actual contralor municipal señaló que, además los integrantes de la pasada administración borraron la base de datos del área de tesorería, a fin de que este tipo de anomalías no fueran detectadas, sin embargo, han logrado recuperar parte de dichos registros, detectando el desvío. La información será presentada ante la Auditoría Superior del Estado (ASE), quien determinará las acciones a emprenderse.