El Valle de San Martín Texmelucan durante la época de la Independencia, fue atractivo para los movimientos sociales debido a que era el paso obligado para ir a la Ciudad de México, además de que había varias haciendas, por lo que había de resaltar en el espacio agrícola de aquella época.
Por lo que, el movimiento insurgente afectó considerablemente la producción, principalmente, del maíz, por la amenaza de varias bandas rebeldes que desde 1811 amenazaron la región y uno de ellos sobresalió: Vicente Gómez, El Capador.
Dicho sobrenombre fue por la saña que denotó en contra de los españoles, así fue el caso que Vicente Gómez participó en varias acciones en la región de San Martín Texmelucan y en otros lugares del centro de México.
VICENTE GÓMEZ, EL CAPADOR
El historiador Lucas Alamán aduce testimonios por el cual se ganó el sobrenombre de El Capador: “lo recibió precisamente por castrar a cuantos españoles caían en sus manos”.
Cabe señalar que Vicente Gómez invadió el 25 de febrero de 1812 el pueblo de San Martín Texmelucan, acción que duró pocas semanas, pues desde Puebla la autoridad militar envió al coronel Cristóbal Ordoñez, sargento mayor del Batallón Americana, con las compañías de granaderos y cazadores; por lo que, antes de huir, El Capador quemó una casa y la hacienda de San Cristóbal Polaxtla.
Vicente Gómez, fue enemigo de toda la forma de gobierno; de ahí el “Manifiesto del Congreso Constituyente del Estado Libre y Soberano de la Puebla de los Ángeles á los habitantes de su distrito (Puebla, Imprenta Nacional, 22 de julio de 1824, firmado por Antonio María de la Rosa, presidente; José María Oller, diputado secretario, y José Ma. Calderón, diputado secretario) se exhorta a luchar contra este malhechor. “Vicente Gómez El Capador ha entrado de fuerza armada en Izúcar hostilizando á los europeos: dícese que entre los que há pescado uno de ellos ha sido don Félix de la Madrid terrible comandante que tuvo El Gobierno Español y que hizo horrendas atrocidades”. Diario histórico de México (18 de abril 1824).
En este sentido, el cuerpo de Don Félix La Madrid fue colgado y cosido a puñaladas. Por lo que, Bustamante consignó: “Se sabe que el Capador Gómez ha hecho una gran matanza en una Hacienda de los Llanos de Apan sin perdonar ni aún a las mujeres. El Jefe Político de esta Ciudad refiere por circunstancia de una atrocidad que no tiene ejemplo, que exprimió las pistolas en las partes pudendas de aquellas infelices. Parece que se le va á proscribir poniendo talla á su cabeza.”
- Puedes leer: ¿Qué se celebra el 15 de septiembre en México?
Fue derrotado en 1816 mientras peleaba bajo las órdenes de Manuel Mier y Terán en las Lomas de Santa María. Cuando varios cabecillas insurgentes fueron hechos prisioneros, condenados y ejecutados, pero Vicente Gómez pudo escapar a la sentencia y continuó sublevado.
A pesar de que la tarde del 26 de noviembre de 1816, la presencia de El Capador y sus 68 hombres, ocasionó un tumulto, pues reunida la población gritaban que se muriera, exigían los pobladores la cabeza de Vicente Gómez, por lo que la guarnición lo protegió para evitar que la gente hiciera justicia.
Más tarde, ya consumada la independencia, en el norte de México volvió a tomar las armas en plan rebelde.
ORIGINARIO DE SAN SALVADOR EL VERDE
Aunque algunos historiadores y cronistas han resaltado que el nacimiento de El Capador, fue en una población del municipio de Ixtacuixtla, Tlaxcala, una reciente investigación del cronista Maximino Pérez, destacó que Vicente Gómez, es originario de San Salvador El Verde.
Así quedó registrado en el archivo parroquial de este municipio:
Al margen: José Vicente
Cabecera
En la Iglesia Parroquial de San Salvador El Verde en cuatro de febrero de mil setecientos noventa y tres años yo Don Mariano Arroyo teniente de cura baptise solemnemente y puse los santos óleos y crisma a José Vicente de un día de nacido hijo natural de Gervasia Gómez castiza hija de Ventura Gómez y Isabel Ortiz de esta cabecera fueron padrinos José de Santiago de la O soltero hijo de José Gregorio y de Juana María de esta cabecera a quien advertí la obligación de educación y enseñanza de la doctrina cristiana y el parentesco espiritual que en primer especie contraía con el bautizado y en segundo con sus padres y lo firme.
Mariano Arroyo
Rúbrica.