ACATZINGO DE HIDALGO, Pue.- Un despliegue de luz y color se vivió en la “Noche mágica” el pasado 14 de septiembre en esta ciudad, en honor a la Virgen de los Dolores, cuya imagen recorrió casi 8 kilómetros de calles adornadas con flores y banderines, además de las majestuosas alfombras de aserrín y frutos que engalanaron el camino.
En punto de las 11:00 horas del viernes cientos de visitantes arribaron a la parroquia de San Juan Evangelista, ubicada en el centro histórico de Acatzingo para acompañar a Nuestra Señora de los Dolores en una procesión que culminó a las 6:00 horas del sábado 15 de septiembre.
Con arena, aserrín de colores, granos, frutas y papel picado, artesanos tapizaron las principales calles de la cabecera municipal, donde exhibieron un estilo único de arte efímero que se ha convertido en uno de los mayores atractivos de la región en los últimos tiempos.
“Es la fe en nuestra madre Santísima la que guía la mano de los devotos y artesanos, quienes confeccionan alfombras multicolores con toda clase de materiales creando verdaderas obras de arte”, dijo Donato García, poblador.
Organizadores del evento religioso, señalaron a este medio que a dicha festividad arribaron más de 5 mil visitantes de varios estados de la república mexicana y de municipios aledaños. Seguridad pública municipal reportó saldo blanco al termino del evento.
Fue así como este 2018 los acatzingas celebraron una vez más la fiesta religiosa más importante del lugar, que a decir de los pobladores es una noche única e inigualable, donde abundan los fuegos pirotécnicos y se recibe a los turistas con tamales, atole y música para amenizar la fiesta.
Cabe recordar que después de la Fiesta de la Exaltación de la Cruz, la Iglesia conmemora a Nuestra Señora de los Dolores. Esta devoción viene desde mucho tiempo atrás y fue en 1814 que el Papa Pío VII estableció esta celebración para el 15 de septiembre.