Olimpia Coral Melo Cruz, tenía 18 años cuando fue víctima de ciberacoso al difundirse un video sexual por su ex pareja en internet, lo que le afectó gravemente. Pasó de ser “la gordibuena de Huauchinango” a la “gordibuena de Puebla”, y pese a contar con el apoyo de su familia, dejó su casa y su carrera trunca para trabajar por erradicar y castigar la violencia digital en todo México.
En su lucha, fue respaldada por mujeres de todo el país que habían sufrido lo mismo y logró que el Senado de la República aprobará la “Ley Olimpia”, que reconoce un delito que no existía en México, que es la difusión y producción “no consentida” de contenidos íntimos en imágenes, videos y audios, conocidos como “packs”, que hoy se castigan hasta con 8 años de cárcel.
Las mujeres de su casa, empezando por su mamá y su abuela, lejos de espantarse, fueron su gran apoyo y le mostraron el significado de la sororidad que hoy pone en práctica con mujeres que han sufrido lo mismo y las que forman parte de su colectivo: Frente Nacional para La Sororidad y Defensoras Digitales.
SU MADRE Y SU FAMILIA, UN APOYO
“El día que detonó esto fue un domingo familiar, estábamos en casa a punto de ver una película y mi familia no sabía nada de lo que estaba pasando, llegó mi hermanito de 14 años con el celular en la mano, aventó el celular en la cama y le dijo a mi mamá: ahí está ese pinche video que dicen de mi hermana, si existe, es ella, se dejó grabar y me lo están mandando”, detalla.
Olimpia Coral refiere que se lo mandaron a toda su familia y conocidos, la gente le decía: “estas quemadísima en las redes sociales, tu vida ya se acabó, que vergüenza ser tú, que vergüenza tu cuerpo”.
“Entonces mi mamá me arrebató el celular y vio el video de 1 minuto con 30 segundos. La verdad ya había aguantado que lo viera el Ministerio Público, la gente, los vecinos, amigas, amigos, ya lo peor era que lo viera la familia”, señala.
“Yo esperaba que me corrieran, o me golpearan, pero no fue así, a pesar de todas las condiciones de desigualdad con las que fueron criadas mi mamá, mi abuelita y todas las mujeres de mi familia, lo primero que dijo mi mamá fue: hija ¿tú querías que este video lo vieran todos y todas? Le dije no, claro que no. Me dijo bueno mija entonces no es tu culpa. Esa fue la primera vez que yo escuche que alguien me dijo ´no es tu culpa´. En ese momento dije si la máxima autoridad en mi vida me dice que no es mi culpa, entonces que se vayan a la jodida todos los demás”, señala.
Sin embargo, Olimpia Coral insistió con su madre que la ayudara a salir del país porque ya no quería vivir ahí, su nombre estaba ligado a un video sexual y al hastag #olimpialagordibuena de huachinango. Entonces su mamá con templanza le contestó:
“Hija, entonces sacó la frase icónica que es lo que siempre me ayudó y ahora se las digo a las víctimas: “tú no tienes que tener vergüenza, tu no hiciste nada malo, vergüenza ellos, porque lo que tu hiciste todas las personas lo hacemos, todas y todos cogemos hija (…) no hiciste algo que las personas no hagan, no tengas miedo, no tengas vergüenza y lucha porque tu cuerpo no es un crimen”, advierte.
“¿Te da vergüenza tu cuerpo, tu celulitis, tus pelos, todo lo que dicen de ti? le dije si, y me dijo: bueno, mañana vamos a ir todas las mujeres de esta casa a caminar por la calle, vamos a llegar al Palacio Municipal desnudas, y que se burlen de nosotras, de nuestras lonjas, de la celulitis, de nuestras vaginas, de nuestros senos caídos, que se burlen de todo pero tú no estás sola. Ahí conocí la sororidad”, sentencia.
“EL SEXTING” Y SUS CONSECUENCIAS
El intercambio de material íntimo con otra persona de manera consensuada, como el video que hizo con su novio y después se hizo viral en redes sociales, es conocido como “sexting”, se considera un derecho sexual y no se castiga. A este respecto, Olimpia Coral advierte que si vas a hacer esto con alguien te cuestiones si el receptor de tus desnudos merece tu confianza.
“Si te pide hacerlo a cambio de ser tu novio o amarte, no lo hagas; no confíes si te pide hacer algo en lo que no estás de acuerdo; si le conociste en una página web, menos, porque muchas de estas personas enamoran mujeres para sacarles contenidos íntimo y ´sextorsionarlas´”, detalla.
Olimpia Coral refiere que si lo vas a hacer utilices la tecnología a tu favor para borrar información, que nunca se vea tu cara y además le mandes un mensaje a la persona diciéndole que no autorizas difundir el contenido y si lo hace lo vas a denunciar por el artículo 255 del código penal del Estado de Puebla en el que, violar la intimidad sexual, se castiga hasta con 6 años de cárcel.