De cada 100 niños poblanos, 69 han sufrido violencia emocional, 21 ha sufrido violencia física y uno violencia sexual, de acuerdo a lo revelado en el último estudio realizado en 2004 por el Programa de Prevención del Maltrato del Menor (PREMAN).
Lo anterior coincide con las declaraciones del Jefe del departamento de clínicas de prevención y atención al maltrato del Sistema Estatal DIF, Gabriel Jiménez Méndez, quien asegura que la violencia física, psicológica y sexual son el tipo de reportes de violencia infantil más recurrentes en el estado.
Reconoció que la incidencia de violencia en niñas, niños y adolescentes sigue en aumento y junto con ello el nivel de agresión, las cuales, deben ser canalizadas a un procedimiento penal para realizar las investigaciones correspondientes, debido a que muchos de los casos ya son tipificados como delito.
Aseguró que, a la fecha, la Fiscalía ha registrado la violencia familiar como el segundo delito de mayor incidencia en el estado debido a que el nivel de agresión al interior de las familias ha incrementado.
Ante este panorama y en el marco del Día internacional de los niños inocentes víctimas de agresión, que se conmemora el 4 de junio, Gabriel Jiménez Méndez destacó que es importante adoptar medidas preventivas para abatir esta problemática, toda vez que la violencia y agresión infantil puede identificarse desde la falta de identidad, violación a sus derechos de salud y educación, hasta el abandono, abuso sexual e incluso homicidio.
CONSECUENCIAS A LARGO PLAZO
De acuerdo la Organización Mundial de la Salud, el maltrato infantil es una causa de sufrimiento para los niños y las familias, y puede tener consecuencias a largo plazo.
El maltrato puede ser causa estrés y se asocia a trastornos del desarrollo cerebral temprano; incluso se ha comprobado que los casos extremos de estrés pueden alterar el desarrollo de los sistemas nervioso e inmunitario, desencadenando en el infante trastornos conductuales e incluso pueden ser propensos al suicidio.
¿QUÉ HACER EN CASO DE DETECTAR UN CASO DE VIOLENCIA INFANTIL?
El departamento de prevención y atención al maltrato del Sistema Estatal DIF, recomienda que ante la sospecha de un caso de violencia infantil es importante realizar un reporte para iniciar una evaluación para confirmar o descartar si el infante -ya sea recién nacido y hasta los 18 años de edad- está siendo víctima de algún tipo de violación.
Una vez que tiene identificado al agresor y a la víctima se hace una primera visita para verificar las condiciones en las que vive la familia y posteriormente se realizan pruebas de valoración médica y psicológica.
En caso de confirmarse un caso de violencia infantil se da pie a los protocolos médicos y jurídicos para salvaguardar la integridad del menor.
Área de clínica de atención y prevención al maltrato
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