El Arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, condenó la violencia que se registró en el estadio de fútbol de Querétaro y refirió que todas las expresiones de inseguridad y agresiones que enfrenta el país son producto del desprecio a la vida.
“¿Cuánto desprecio a la vida vivimos en este mundo violento, injusto e inseguro?, ¿cuánto desprecio a la vida?, ¿cuántos asesinatos, cuántos desaparecidos, cuántos muertos en la guerra, cuánta violencia?, ahora anoche en un estadio de futbol, donde el deporte debe promover los valores pero que resiste ver ese tipo de violencia”, dijo durante la misa en Catedral.
El líder de la grey católica sostuvo que la humanidad está frente a pugnas por el poder y el control, que han desatado guerras como la que se vive entre Rusia y Ucrania y otros conflictos en diversos países del mundo, incluido México.
“Nuestra patria está siendo destrozada por el crimen que nos ha puesto también en estado de guerra sangrienta y fratricida y buscar el poder, la riqueza y el dominio a costa de lo que sea, incluso destruyendo o asesinando, eso es postrarse ante el demonio”, dijo.
El Arzobispo de Puebla manifestó que en medio de este panorama de violencia, la sociedad debe aspirar y buscar ser libre, vivir en paz y para ello debe estar en paz con Dios y con los semejantes.
Señaló que al igual que Cristo, hoy los fieles católicos enfrentan diversas tentaciones, porque estas son naturales y deben ser enfrentadas, porque así se lucha contra el pecado.
“Todos tenemos tentaciones y el ser humano siempre tiene y tendrá estas tentaciones, en el primer caso de sobrellevar la vida perdiéndole sentido a la existencia, dedicándose a cosas superfluas, sin tener ideales que seguir y esperanzas que sostener”, declaró.
Por lo anterior, sostuvo que ahora que ha iniciado el periodo de la cuaresma, es importante llevar a la práctica la reflexión y conversión, ya que cuando se pierde sentido a la propia existencia entonces surge la incapacidad para apreciar la vida de los demás.