Este 21 de marzo, la ciudad de Puebla perdió a una figura en su escena culinaria. Manuel Merlo Cuanalo, fundador de las famosas Cemitas América, ubicadas en la 2 Norte, entre 12 y 14 Oriente del Centro Histórico, quien falleció a los 88 años de edad por causas desconocidas.
Fue durante la tarde del jueves que comenzó a circular la información redes sociales, momentos después, el hijo del fallecido confirmó a esta casa editorial la noticia que ha causado tristeza en los consumidores de las Cemitas de cabeza.
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Durante más de 70 años, las Cemitas América han sido un lugar de referencia para los amantes de la comida en Puebla. Su especialidad, las cemitas de cabeza de puerco, han deleitado los paladares de generaciones. Actualmente luce adornado con los colores del equipo de futbol americanista y hasta con una imagen de Manuel boxeando cuando era joven.
Desde hace ya algunos años, Manuel ya no estaba a cargo del establecimiento, por lo que su hijo, quien se llama igual, se hace responsable de preparar y vender los alimentos, sin embargo en algunas ocasiones el fundador acudía, generando alegría, sobre todo en los comensales que lo recordaban cuando estaba al frente del negocio.
Más sobre Cemitas América
Las famosas Cemitas América se fundaron en 1953, su historia se remonta a sus raíces como una modesta carnicería, propiedad del padre de Manuel. Sin embargo, la visión emprendedora de Manuel lo llevó a convertir este espacio en un punto de encuentro para los amantes de la comida y empezó a vender tacos.
Durante algún tiempo la carnicería y el puesto de tacos coexistieron, sin embargo, después se decidió por enfocarlo solamente en comida, en el pequeño local. Colocaron una mesa y empezaron a andar el negocio, que a la postre se enfocó en solamente Cemitas.
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“Al principio vendíamos más tacos… pero después la gente comenzó a consumir tanto las cemitas que decidimos se quedaran solo las cemitas, dejamos de vender los tacos, ya que era lo que pedía toda la gente”, explicó Manuel Merlo en una entrevista pasada a El Sol de Puebla.
Fueron muchas las anécdotas que vivió el establecimiento durante la estancia de Manuel, desde la visita de famosos por la cercanía con un teatro de espectáculos llamado Melmo Rodante’ (según recordó Merlo), hasta que en algún momento lo quería clausurar por la grasa que generaban por la comida.
A pesar de que el negocio lleva el nombre de "Cemitas América", no tiene relación directa con el equipo de fútbol homónimo. El nombre se debe a la devoción de Manuel hacia la Virgen de Guadalupe. Sin embargo, Manuel no vio mal el ilustrarlo con el estilo futbolero.