“No desperdiciemos la segunda parte de nuestra vida”, fue el mensaje que recibió de su padre Fernando Parrado, sobreviviente de la caída de un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya en 1972, al reconocer el suceso como la peor tragedia de su vida.
Tras encabezar la ponencia magistral del primer día del Festival de las Ideas 2024, el empresario uruguayo, quien es conocido por haber sobrevivido las peores condiciones en Los Andes, compartió a la audiencia poblana sus aprendizajes sobre el hecho que cambió su vida para siempre.
De acuerdo con lo relatado por Parrado desde el Auditorio Metropolitano de la ciudad de Puebla, él y sus amigos lograron sobrevivir gracias al amor y la confianza que prevaleció en todo momento, ya que el apoyo mutuo fue el motor de supervivencia en todo momento.
Relató que este hecho fue una tragedia, y aunque sostuvo que muchas personas lo consideran un héroe, él no acepta ese calificativo, pues en realidad nunca soñó ni siquiera anheló vivir esa situación.
Recordó que cuando ocurrió el desplome del avión en las gélidas montañas de Los Andes, él tenía apenas 21 años de edad. En ese entonces, afirmó, buscaba cumplir muchas metas acompañado de su familia y seres queridos.
Este viaje, sin embargo, le arrebató a su madre y su hermana, quienes decidieron acompañarlo a Chile a emprender un partido de rugby.
A propósito, señaló que el hecho de tener que enterrar en medio de la nieve a su familia fue una experiencia que nunca superará. Compartió que, aunque no pudo despedirse de su madre, a su hermana le pudo decir adiós antes de que diera su último aliento.
Luego de ser encontrados por un arriero de nombre Sergio Catalán, quien residía en una localidad situada a más de 10 horas de distancia donde fueron hallados, empezó el momento más difícil de su vida, afirmó.
Parrado recordó que volver a casa y encontrarse con su padre, quien creía que él, su hermana y su madre ya estaban sin vida, fue un momento que nunca borrará de su mente, pues fue ahí cuando recibió uno de los mensajes más transformadores.
“No desperdiciemos la segunda parte de nuestra vida”, le dijo a Parrado su padre.
A partir de este momento, afirmó el empresario uruguayo, buscó transformar todos los aspectos de su vida. Formó una familia y fue así como encontró una nueva visión para existir, aseguró.
Sostuvo que su triunfo es el legado que deja al mundo a través de su familia. Compartió que la oportunidad de poder vivir junto a sus dos hijas y esposa es la razón de su existencia, ya que todo lo demás, apuntó, es superfluo.
Cabe recordar que el hecho, conocido como el accidente del vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya, se registró el 13 de octubre de 1972. El viaje era tripulado por el equipo de rugby Old Christians Club, que se componía en su mayoría de jóvenes de 19 años de edad en promedio, así como de sus familias.
El avión se estrelló en la cordillera de los Andes, esto luego de que los pilotos del mismo descendieron en las montañas al creer erróneamente que se encontraban cerca de su destino, el Aeropuerto Los Cerrillos, en Santiago de Chile.
Según las cifras oficiales, en la aeronave viajaban 40 pasajeros y cinco integrantes de la tripulación. De todos ellos, sólo 16 lograron sobrevivir. La travesía duró exactamente 72 días, cuando rescatistas acudieron por ellos, esto luego de que Parrado tomó la decisión de partir a buscar ayuda junto con un puñado de compañeros.
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Recientemente, la cinta titulada La Sociedad de la Nieve, que narra el drama vivido por los jóvenes uruguayos en 1972, y que fue dirigida por Juan Antonio García Bayona, fue nominada a los premios Oscar en la categoría Mejor Película Extranjeras
Finalmente, Parrado compartió que, aunque obtuvo varios aprendizajes de este trágico suceso, una de las enseñanzas más importantes fue reconocer que la vida nunca será perfecta, y que lo mejor que hay para sobrellevar dicha situación es vivir con plenitud y amar descontroladamente a tus seres queridos.