El pasado 16 de agosto la interrupción del embarazo hasta las 12 semanas de gestación dejó de ser considerado como un delito en Puebla, y a 40 días de dicha aprobación no se ha modificado la Ley de Salud para que las mujeres acudan a cualquier clínica y les realicen este procedimiento. Para activistas, esto es un pendiente de los diputados locales y exhortaron a las poblanas a hacer públicos sus casos en el supuesto de que les nieguen el servicio.
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Este 27 de septiembre, se llevó a cabo la “Fiesta abortista”, un evento en donde colectivas celebraron que, en agosto, se hayan reformado los artículos, 339, 340, 341, 342, y 343 del Código Penal, para incluir modificaciones que permitan a las mujeres interrumpir la gestación. A su vez, aprovecharon la actividad para conmemorar el Día de Acción Global por el Acceso al Aborto Legal y Seguro (28 de septiembre), una fecha que busca visibilizar la lucha por los derechos reproductivos.
En su pronunciamiento, las feministas aplaudieron que los legisladores hayan saldado una deuda histórica con las poblanas. Además, reconocieron a todas las activistas qu
e durante varios años no dieron marcha atrás para que esto se concretara.
Estamos aquí gracias a las manifestaciones, bailes, talleres, jornadas informativas, mesas de trabajo, parlamentos abiertos mucha resistencia, pero sobre todo esperanza de las que nos antecedieron declararon.
Piden alzar la voz si se niega el servicio
No obstante, aceptaron que este no es el fin de la lucha, aún quedan deudas pendientes en materia de la libre elección de las mujeres y de las personas gestantes. Por ello, en el marco del 28S, hicieron un llamado a los legisladores recién incorporados para que de manera conjunta se busque la reforma a la Ley de Salud y así ampliar el acceso a los servicios de atención.
Es importante mencionar que, aunque dicha Ley no está reformada, el servicio debe de brindarse, ya que desde meses atrás de la despenalización, en el estado se efectuaba en siete clínicas. Incluso, pidieron a las mujeres que les nieguen el servicio en próximos días que levanten la voz y que hagan público el hecho. Las organizaciones también estarán abiertas a escucharlas y orientarlas, como: CAFIS, Ddeser, Odesyr y REDefine Puebla.
Desde que se publicó la reforma en el Periódico Oficial del Estado de Puebla (POE) hasta la fecha, no hay una cifra exacta de a cuántas mujeres les han negado el servicio.
De igual modo, aprovecharon la “fiesta abortista”, para exhortar a las poblanas y poblanos que aún abrazan los discursos conservadores para que se cuestionen y en unanimidad logren una despenalización social.
Que ninguna mujer vuelva a sentirse castigada o culpable por decidir sobre su cuerpo expresaron.
En esta “fiesta abortista” se regalaron stickers, se hicieron pulseras de la amistad, se hicieron encuestas de “verdad o falso”, se colocaron historias de “yo aborté” y pidieron a todos los transeúntes que preguntaran lo que quisieran acerca de educación sexual. “Decidir es sagrado, justo y necesario”, "María fue consultada para ser madre de Dios”, “recuerda, cada persona tiene sus propias razones para abortar”, fueron algunas de las consignas.
¿Qué es el aborto legal, seguro y gratuito?
Se refiere a la práctica de interrumpir un embarazo bajo condiciones que son permitidas por la ley, realizadas en entornos seguros y sin costo para la persona que lo solicita. A continuación, se mencionarán algunos de sus componentes:
Legal: El aborto está permitido por las leyes de un país o región, lo que significa que no es considerado un delito y hay normas claras que regulan su práctica.
Seguro: El procedimiento se lleva a cabo en instalaciones de salud adecuadas, por profesionales capacitados, utilizando métodos médicos que minimizan riesgos para la salud de la persona. Esto contrasta con los abortos inseguros, que pueden ocurrir en condiciones peligrosas y sin supervisión médica.
Gratuito: El acceso al aborto no implica un costo para la persona, lo que asegura que todas las personas, independientemente de su situación económica, puedan ejercer su derecho a decidir sobre su propio cuerpo y salud reproductiva.
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Este enfoque promueve la salud y el bienestar de las personas gestantes y es parte de una visión más amplia de derechos sexuales y reproductivos.
