Cada 20 de febrero se celebra el Día del Camarógrafo y Fotógrafo, esta fecha es alusiva a la primera producción de un daguerrotipo en América Latina. Los fotógrafos y camarógrafos son trabajadores de primera línea que están entre los manifestantes y policías, ingresando a zonas que son evacuadas o restringidas para captar, compartir e informar a quienes observen sus imágenes.
El 2020 vino a alterar la vida social en todos los aspectos. Para este grupo de compañeros la llegada del Covid 19 ha sido más trabajo en calle, hospitales, el piso de una banqueta o una banca. Es por eso que, en homenaje a su labor y desempeño, presentamos estas imágenes y testimonios que, si bien no son de todos, esperan representar a todo el gremio.
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FERNANDO BRAVO SÁNCHEZ (CAMARÓGRAFO)
Su trayectoria laboral iniciada en TV Azteca e Imagen TV ya ronda la década, fueron las prácticas realizadas con Edgar Torrentera las que le marcaron el camino para tomar una cámara y salir a grabar imágenes. “Al salir me di cuenta de la fuerza y el poder de la imagen”. Entre sus momentos de más impacto y sensibles se encuentra la cobertura de la explosión San Martín Texmelucan, pero también hay experiencias como la de salir con cámara al hombro mientras se desliza por la tirolesa. Para salir a trabajar ha tenido que vencer miedos, pero con la pandemia el miedo es diferente, ya que en un inicio “fue complicado el tener que salir a trabajar todos los días y aun usando gel y medidas de sana distancia”, sin embargo, tiene la preocupación y espera no ser la vía de contagio para su familia. Fernando es un compañero que buscará la mejor toma, para lo cual no dudará en hacer lo necesario y más para encontrar el lugar que le haga tener un mejor desempeño en su profesión.
KAREN ROJAS (FOTÓGRAFA)
Fotógrafa de prensa desde hace 8 años, los últimos cinco laborando en el diario El Popular. Tras la llegada del Sars-Cov-2, nos relata cómo el entorno para desempeñar su labor cambió, pues acudir a un hospital Covid era un asunto sensible, por lo que para captar una imagen tenía que ser tomando precauciones y siendo lo más respetuoso posible. “Una vez nos amenazaron, nos dijeron que con solo tocarnos nos iban a contagiar, eso me impactó”, relata. Una de sus preocupaciones al momento de cubrir alguna noticia es el espacio, ya que no en todos los lugares es posible guardar una distancia recomendada, como en el IMSS de La Margarita, donde además de que hay muchos familiares de pacientes internados, el propio espacio es reducido.
DELFINO NOLASCO AGUILAR (CAMARÓGRAFO)
Actualmente es camarógrafo en la empresa Multimedios, con quince años de trayectoria. El cambio más importante sufrido por la pandemia para él es el uso de cubrebocas, gel antibacterial y tener que aprender una rutina para desinfectar los equipos que han sido utilizados por otro compañero. Durante este tiempo ha tenido que cubrir jornadas extras debido a contagios de sus compañeros, en ocasiones incluso sus días de descanso por falta de personal. “Actualmente me siento más expuesto por el virus que por la gente, la gente busca apoyo a través de los medios de comunicación, la gente ha perdido el miedo a que sepan que están contagiados, uno de los casos hace escasos veinte días fue el de una familia infectada por Covid-19, debían una cantidad impagable, vendieron su casa y demás bienes, la esposa estaba en cuarentena….fue tanta la necesidad que se atrevió a salirse para pedirnos ayuda, pero yo le pedí que ingresara a su domicilio, su semblante era pálido y tosía mucho. Buscamos apoyarla vía zoom para pedir apoyo para poder sacar a su esposo porque si ella no pagaba la deuda, iban a desconectar a su esposo. Ese día nos bañamos de sanitizante y todo el día anduve con el miedo y creo que se volvió un problema psicológico, ya que más tarde sentí que me faltaba el aire.
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JAFET ROMERO MOZ (FOTÓGRAFO)
En estos cinco años como fotógrafo ha laborado para las agencias Enfoque y Es Imagen, además de publicar en medios nacionales. Con la pandemia “he aprendido a valorar más todo lo que tengo, si bien nosotros como fotógrafos estamos expuestos día con día a ser contagiados y por ende llevar el virus a nuestros hogares por el hecho de andar en hospitales, en la calle documentando todo lo que la pandemia va dejando y cuando eres joven no mides el riesgo que corres para conseguir una toma. Todo esto me ha hecho más maduro en mi entorno personal, valorar lo afortunado que soy por tener a todos mis familiares y amigos con bien”. Nos comenta que el uso del cubrebocas causa desconfianza entre la gente al momento de tomar una fotografía, “hoy ya no quieren que les tomes fotos y de cierta forma es entendible”.
La experiencia más difícil durante su trabajo “es el traslado de un niño de aproximadamente 6 o 7 años, lo bajaron de la ambulancia moribundo, con oxígeno y lo ingresaron al área Covid del IMSS La Margarita. Me impactó mucho porque tengo una niña de 2 años y sobrinos de 6 y 7 años, hasta llegué con un dolor en el estómago ese día. En esto no te queda más que seguir cuidándote y recordarles a las familias que no bajen la guardia”.