De nueva cuenta el regidor Ángel Rivera Ortega fue expuesto por el Frente Poblano de Deudores Alimenticios, en esta ocasión porque una persona que trabajó con él, denunció presunta violencia de género, violencia laboral y violencia política. Las integrantes del grupo mantuvieron el nombre de la mujer en el anonimato, pero “cuando pierda el miedo”, lo harán público.
Fue la mañana de este 17 de noviembre, cuando las integrantes del grupo se manifestaron en el zócalo de la ciudad y posteriormente acudieron a las puertas del Ayuntamiento de Puebla en donde se estaba realizando la sesión de Cabildo. En el lugar, indicaron que este caso es independiente al de su ex esposa, quien lo señaló como deudor alimenticio hace unos meses.
“Hoy venimos respaldado una violencia de género, no podemos dar más detalles y decir quién fue violentada, pero sí le daremos nuestro respaldo y la persona ya forma parte de nuestro colectivo. Nosotras estamos iniciando esto para que el Ayuntamiento de Puebla sepa, pero ella hablará abiertamente de lo que vivió en su área laboral cuando pierda el miedo”, comentaron Diana González y Sheridan Mata, integrantes del grupo.
Las mujeres del frente no quisieron confirmar si esta mujer aún es empleada de la administración municipal, sólo anunciaron que en su momento darán todos los detalles de la violencia que vivió, la cual, se registró en este año. “Ya no queremos más servidores públicos que sean violentadores”, expusieron.
Puntualmente Sheridan, informó que previo a manifestarse buscó acercamiento con trabajadores del Ayuntamiento de Puebla para exponerles este caso, pero “la ignoraron”, fue por ello que determinaron exponer públicamente al regidor. “Sabemos que hoy están en Cabildo, por eso venimos, recuerden que cada patrulla es estratégica”.
Fue en septiembre pasado cuando el regidor Ángel Rivera fue denunciado públicamente por violencia familia y por ser un deudor alimenticio. Marlene Morales Rodríguez, expareja, confirmó que desde hace dos años no vive con el funcionario municipal, pero desde entonces, él no se ha hecho responsable de sus obligaciones de asistencia familiar.
“Yo estoy tranquilo”, fue como respondió Rivera Ortega luego de estas acusaciones y evitó abundar sobre los señalamientos en su contra, pues no había sido notificado formalmente de algún procedimiento legal. En aquella ocasión, dijo que no quería que sus hijas resultaran perjudicadas.