La cifra de personas fallecidas a causa del enfrentamiento armado entre integrantes del movimiento Fuerza Territorial Poblana y un grupo delincuencial de origen guerrerense, en el municipio de Jolalpan, en la Mixteca poblana, se elevó a seis, según confirmó el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.
En conferencia de prensa, el mandatario validó que durante la tarde del miércoles, un conjunto delictivo que opera en Guerrero logró “invadir” territorio poblano, razón por la cual integrantes de Fuerza Territorial Poblana, que se identifican a sí mismos como autodefensas, actuaron en consecuencia y fue así como se inició el conflicto.
“Los hechos [ocurrieron] al filo de las tres de la tarde, en el cual (...) se habla de un cartel que funciona en Guerrero y que invade territorio poblano en esa zona limítrofe de la Mixteca poblana”, relató.
Y agregó: “Hoy hay seis muertos y un número de heridos no determinado [todavía] porque está en proceso la identificación de ellos (...) el ministerio público encargado de la investigación son los que van a reportar el número oficial”.
Tal como informó El Sol de Puebla, el combate empezó cuando el grupo poblano fue alertado de la presencia de las personas de origen guerrerense en la demarcación. Con ello, el líder de la autodenominada policía comunitaria, Eloy Merino, ordenó la movilización de su gente hasta el paraje conocido como el Ciruelo, en la carretera Huachinantla-Teutla y fue ahí donde inició el intercambio bélico.
La información conocida por esta casa editorial hasta la noche en la que ocurrieron los hechos, fue que Merino habría fallecido junto con otras dos personas cuyas identidades siguen siendo desconocidas; aunado a ello, se supo que dos individuos resultaron heridos de gravedad, además de un vehículo calcinado.
Barbosa descalifica a autodefensas
En ese contexto, el titular del Ejecutivo se pronunció en contra de las corporaciones autodenominadas ‘policías comunitarias’, tal es el caso de Fuerza Territorial Poblana, pues opinó que su existencia “es inadmisible para la vida institucional del Estado”. Al respecto, externó que será la Fiscalía General del Estado (FGE) quien determine si dicho grupo contaba o no con el permiso para portar armas.
“Salvo que en estas investigaciones resulte que tienen alguna acreditación legal, no son policías de ningún orden de gobierno, y (...) desarrollan actividades relacionadas con hechos delincuenciales, se llaman autodefensas comunitarias (...) Cuando [alguien] tiene un arma, tiene que tener una licencia expedida por un superior jerárquico y es así es como se legaliza la vida institucional de las fuerzas del orden”, comentó.
Refirió que la creación de estas agrupaciones están influenciadas, en su gran mayoría, por el movimiento de José Manuel Mireles Valverde, quien en vida fue vocero de las Autodefensas de Michoacán: “Vino a dictar y a enseñar ese famoso doctor Mireles, de Michoacán, cuando recorría el país con estos propósitos”.
En ese tenor, la decisión del mandatario poblano en relación a los hechos ocurridos en Jolalpan, fue que debe diseñarse una “estrategia muy específica” en coordinación con autoridades de los tres órdenes de gobierno, con el objetivo de evitar que “se sustituya la vida institucional en materia de seguridad pública”.
Por último, sentenció que “ningún grupo ciudadano armado (...) será la estrategia que determine el comportamiento para devolver a toda esa zona la tranquilidad que necesita”. Dijo que, si bien, garantizar la protección ciudadana es prioridad, también lo es combatir la creación de estos grupos de autodefensa: “Primero es la gente, pero también hay que resolver las cosas (...) de inseguridad y de violencia y de la presencia de grupos delincuenciales”.