Desde hace más de un mes en el llamado Triángulo Rojo hay frecuente escasez de combustibles. Tan solo ayer 25 gasolineras de la zona carecían de gasolinas y diésel, reveló la presidenta de la organización Gasolineros Unidos de los Estados de Puebla y Tlaxcala (GUEPT), Luz María Jiménez Almazán.
La representante de los empresarios del sector informó que los problemas de abasto en la región que comenzaron durante la segunda quincena de diciembre, cuando el Gobierno Federal determinó suspender el suministro de productos a través de ductos y hacerlo únicamente mediante pipas, persisten hasta la fecha.
Por esta razón, denunció que desde entonces las gasolineras de la zona sufren constantemente de la falta de productos, entre uno y hasta cinco días sin gasolina magna, hasta ocho sin diésel y más sin gasolina premium, de modo que algunas han tenido que suspender sus servicios cada tres días en promedio.
Tan solo ayer, añadió, 25 estaciones de servicio ubicadas en municipios como San Salvador Huixcolotla, Quecholac, Tecamachalco, Tepeaca, entre otros de la región, reportaron carencia total de los productos, “está terrible la situación y lo peor: niegan que falte combustible”, completó.
Y agregó que esas no son las únicas estaciones de servicio con problemas, pues hay otras 55 por toda la entidad que también reportan escasez de productos.
Por ello, Jiménez Almazán compartió a El Sol de Puebla un oficio enviado a Miguel Breceda Lapayre, director de Pemex Transformación Industrial, mediante el cual le solicitan su ayuda para garantizar la existencia de combustibles en las Terminales de Almacenamiento y Reparto (TAR) de Puebla, Veracruz y Azcapotzalco, que son a las que recurren los empresarios del estado a surtirse de combustibles, pero en las que en ocasiones tampoco han encontrado producto.
En el documento, además, celebran que se enfrente el robo de combustibles, pero exigen que no se afecte a las gasolineras que viven de la venta de ellos, “deben buscar opciones para acabar con los delincuentes, pero sin perjudicar al empresario legalmente establecido. Insistimos en pedir a Pemex el abasto, porque consideramos que, como franquiciante maestro o por medio del contrato de distribución, Pemex tiene la enorme responsabilidad contractual de entregar combustibles a las estaciones de servicio para su venta al público; de no hacerlo, perjudica económicamente a las empresas y afecta la movilidad de las mercancías y las personas”, remató.