La presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, acusó que grupos del pasado han querido desequilibrar y deslegitimar su gobierno en este primer año de funciones, pero sin ceder a las presiones por lo que vicios del pasado quedarán erradicados.
Dio a conocer que la corrupción no tiene cabida, ni tampoco consejos de “gatopardistas” que intentaron vender sus conocimientos del antiguo régimen y ahora son sus detractores luego que sus servicios fueran rechazados.
Aceptó errores técnicos, pero no éticos en estos 12 meses de trabajo que sirvieron para “limpiar la casa”, con la finalidad de consolidar en el siguiente año, programas y acciones a favor de la ciudad como rehabilitar vialidades primarias y remodelar la Central de Autobuses CAPU, entre otros.
Ante la presencia del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, funcionarios de su gabinete y regidores, Rivera Vivanco rindió su primer informe de labores en sesión solemne de Cabildo y enfocó gran parte del discurso, al igual que el emitido en el Teatro de la Ciudad, a explicar que la visión de gobierno apegada a la Cuarta Transformación está alejada de abusos y saqueos de las arcas públicas.
Desde el primer día entendí que el no pertenecer a un grupo o élite política del pasado implicaba enfrentar resistencias a la cuarta transformación, no obstante, estamos más fuertes que nunca, en estos doce meses han querido desequilibrar mi gobierno, sin que se den cuenta que están tratando de desequilibrar a Puebla
Sin mencionar nombres ni posibles irregularidades de gobiernos anteriores, la alcaldesa indicó que dejó atrás privilegios con mejoras en el gasto público, por lo que justificó el ahorro que se tiene sin usar por un monto de mil 200 millones de pesos.
En su discurso, hizo alusión al combate a la corrupción, el inicio del proceso legal para revertir la privatización del servicio de agua potable, la suma de esfuerzos con el estado en pavimentar calles, la entrega de estufas ahorradoras o prohibir la siembra de maíz transgénico.
De los temas objeto de críticas como la seguridad pública, solamente hizo referencia a la inversión en equipamiento y compra de patrullas, además de operativos en conjunto con la federación y el estado, pero sin dar a conocer estadísticas sobre resultados sobre la incidencia delictiva. Igualmente pasó con el caso del reordenamiento del comercio ambulante del Centro Histórico, sin mencionar cifras del menor número de puestos en la vía pública y solamente mencionó que se ha liberado el corredor de la calle 5 de Mayo.
Rivera Vivanco se defendió de las críticas en su contra de lo mal hecho en el pasado porque su labor de este primer año, se ha enfocado a reconstruir la ciudad de manera incluyente.
“Este modelo de gobierno no se puede permitir que se quiera engañar a los ciudadanos como los gobiernos anteriores que pretenden deslindarse de sus propios errores: violencia desbordada, privilegios a grupos de extorsión, pobreza, desigualdad, rezago en los servicios públicos e infraestructura que cada año exige inversiones millonarias para cubrir la corrupción de los años previos”.
Rivera Vivanco defendió las diferencias de opiniones en sesiones de Cabildo, considerando que forman parte del proceso democratizador, sin dar entrada a sugerencias para tener el control férreo, por lo que seguirá la pluralidad de puntos de vista.
Reconoció que su gobierno surge de la fuerza del movimiento encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, sin dar paso a la arrogancia ni al culto de personalidad, por lo que la misión es gobernar de manera integral para lograr el tan anhelado cambio.
Por lo que respecta al informe ofrecido en el Teatro de la Ciudad, no acudieron representantes de organismos empresariales, como la Canaco y el Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, por su molestia a temas como la falta de resultados del comercio ambulante y el proyecto de volver peatonal algunas calles.
Asimismo, hubo butacas vacías de la segunda a la cuarta fila de la parte principal del inmueble, por lo que debieron cubrirse con funcionarios municipales que estaban inicialmente en la parte alta.
