Padres de familia de alumnos de la Escuela Primaria “Manuel Rivera Anaya”, ubicada en la unidad habitacional del mismo nombre, denunciaron la agresión a por lo menos siete niños y niñas de primer grado por parte de sus compañeros de sexto grado.
Las denuncias fueron hechas por los padres de familia de los pequeños presuntamente violentados así como por decenas más que se presentaron en la institución para exigir la destitución de la directora Marcela Morales Palacios, aunque no presentaron pruebas de los hechos.
Al respecto, Alejandro Vargas, representante de los padres de familia, reconoció la comisión de hechos violentos entre alumnos sin revelar mayor información, mientras que la Secretaría de Educación Pública (SEP) del Estado anunció que para velar por la integridad de los estudiantes ya inició una investigación para esclarecer los hechos y a partir del próximo lunes implementará varias acciones del Programa Nacional de Convivencia Escolar, orientadas a promover espacios libres de violencia y un trato respetuoso entre los alumnos.
Pero de acuerdo con las denuncias de algunos padres y madres de familia de otros pequeños las agresiones ocurrieron el lunes pasado durante el recreo y fueron graves.
Según sus versiones así como de información revelada en un grupo de Whatsapp del Comité de Padres de Familia, los alumnos mayores golpearon a sus compañeros menores, al grado de que una pequeña llegó al hospital.
Y es que según ellas, un menor considerado como “líder” de sexto grado, secundado por algunos de sus compañeros, agredieron a sus compañeros para cumplir con un reto “Momo”, un juego que ha causado alerta a nivel internacional que consiste en enviar mensajes vía Whatsapp inicialmente para conseguir información personal o confidencial y que recientemente ha desafiado a sus destinatarios a cometer actos violentos.
En consecuencia, explicaron, los niños mayores aprovecharon el momento del recreo para acorralar a sus compañeros más pequeños al fondo de la escuela, en donde los golpearon a mano limpia y con algunos objetos, como botellas, e incluso a una pequeña la forzaron a quitarse la falda y ropa interior, misma que supuestamente resultó con heridas que ameritaron su traslado a un hospital.
Por la situación, varios padres de familia evitaron llevar a sus hijos a la escuela el día de ayer, otros fueron a media mañana a sacarlos de clases y otros se ofrecieron a permanecer en la escuela para vigilar a los alumnos.
Sin embargo, a decir de varias madres de familia, este no es el primer suceso de este tipo en la Primaria, pues el año pasado también dos niñas comenzaron un riña en clase que continuaron al final de clases fuera de la institución y trascendió a los padres, la mayoría coincidió en exigir la salida de la directora Marcela Morales Palacios.