Las afectaciones que hace tres semanas aproximadamente sufrieronlas nuevas instalaciones del Benemérito Instituto Normal delEstado (BINE), debido a las fuertes lluvias que han azotado a laciudad de Puebla, se generaron por falta de cálculos en suedificación.
Así lo reconoció Jorge Cruz Bermúdez, director general delComité Administrador Poblanos para la Construcción de EspaciosEducativos (CAPCEE), quien indicó que las instalaciones delplantel no se inundaron sino que simplemente sufrieronfiltraciones.
Recientemente el líder de la sección 51 del Sindicato Nacionalde Trabajadores de la Educación (SNTE), Jaime García Roque,reportó que las lluvias que se han registrado en últimas fechasprovocaron inundaciones.
El 12 de diciembre del año pasado el entonces gobernador RafaelMoreno Vale Rosas y el secretario de Educación Pública (SEP),Aurelio Nuño Mayer, pusieron en marcha la ampliación yrehabilitación de dicha institución, la cual no había sidoatendida desde hace 46 años.
Los trabajos consistieron en la restauración y construcción de35 edificios con una inversión de 93 millones de pesos; dichasacciones en materia educativa fueron parte del programa de Escuelasal CIEN.
En entrevista, Cruz Bermúdez explicó que las filtraciones sepresentaron por unos orificios que se hicieron en la pared de unode los nuevos edificios para colocar la pesada estructura metálicagarigoleada que funge como fachada.
"No fue una inundación, lo decimos con toda claridad, fueronunas filtraciones que no se pudieron calcular porque en la parteque da hacia la calle, digamos la fachada, tiene una cosa quenosotros le llamamos piel, que son unos garigoleados que le danvida y adornan la estructura del edificio", dijo.
