Desde el pasado 5 de abril del 2023, Alejandra comenzó un juicio de alimentos provisional, ya que el progenitor de su bebé, mejor conocido como “Chucho N.”, no otorgó los gastos que necesitó durante la gestación y hoy en día, tampoco quiere dar pensión alimenticia. En suma, este hombre la golpeó mientras estaba embarazada y eso provocó que el niño tenga una displasia de cadera.
Este hombre trabaja para la empresa Radiocare, la cual está subrogada en el Hospital Guadalupe. Sin embargo, la compañía se alió con el presunto deudor alimenticio y lo protege al grado de mentir que no está en su nómina para que no cumpla con sus obligaciones de asistencia familiar.
Hay que mencionar que “Chucho”, asegura ser un “técnico radiológo”, pero no cuenta con un título y cédula profesional. Incluso, Alejandra en compañía de las integrantes del Frente de Deudores Alimentarios en Puebla, acudieron a dejar un escrito al hospital para dar a conocer esta situación, pero el personal se negó a atenderlas.
“La señora Vanessa Reyes Martínez es la gerente del hospital Guadalupe, acudimos para que tuviera conocimiento de que el señor ya tiene una sentencia de pensión y de todo lo de mi infancia. Nos recibió una señora en recepción, la cual no dio su nombre y al ver que grabamos se escondió (…) no es posible que sigan encubriendo a deudores y violentador cuando ya saben de toda la situación que envuelve a mi infancia y al igual tener a un supuesto profesional de salud sin título profesional”, expuso.
Alejandra no sabía que su infancia tenía una displasia de cadera, fue hasta que nació el bebé que los especialistas se lo diagnosticaron. Esto se debió a que el 27 de diciembre del 2022, la golpeó pese a su embarazo. Hoy en día, solo quiere que su ex pareja se haga responsable.
“No se hizo cargo durante toda la gestación, es decir, de alimentos, consultas prenatales, ultrasonidos y vitaminas. Al comprobarlo con las autoridades, me otorgan una pensión del 40 por ciento, ya que el señor percibía dos salarios, el del hospital de la Cruz Roja en Puebla y el de la empresa Radiocare, misma empresa está subrogada en el Hospital Guadalupe”, indicó.
Pese a la condición del niño y pese a que está asentado el contexto violento que vivió, “Chucho” logró visitas sin supervisión y Alejandra no duda que en un futuro quiera la custodia total, ya que es un actitud recurrente que se ve dentro de los deudores alimenticios para intimidar y para no pagar.
“Él sabe de los riesgos que contrae esta situación de salud del menor, peor aún así, el juez Raúl López Hernández, avaló una visita sin supervisión y no tomó en cuenta el tema penal por violencia familiar, mismo donde ya se le vinculó a proceso”, criticó.
Este 31 de enero, la mujer fue a dejar un oficio al Poder Judicial del Estado de Puebla para hacer de su conocimiento toda esta situación. Solo pide que su caso se lleve con perspectiva de género y que pongan en primer lugar el bienestar del menor de edad.