La fiesta religiosa y popular regresó a la explanada de la Capilla Real Naturales con la realización de La Tlahuanca. Música de viento, pirotecnia, vendimia y el circular de decenas de personas reanudaron este festejo de los barrios de San Pedro Cholula.
Fue después de las 15:00 horas, cuando un gran contenedor con mil litros de pulque fue bendecido por autoridades eclesiásticas, cuyo contenido luego comenzó a repartirse entre los mayordomos.
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Jarros de barro que promocionaban la junta auxiliar de San Matías Cocoyotla, fueron los utensilios donde esta “bebida de los Dioses” fue distribuida de manera gratuita entre los asistentes.
Junto con la repartición de pulque, en este recinto religioso que es atractivo emblemático de San Pedro Cholula, la gente aplaudió y compartieron alimentos servidos por los organizadores.
Antes de esta fiesta que muchos llaman “borrachera espiritual”, los feligreses de la religión católica cumplieron con el programa marcado para el cuarto lunes de Cuaresma, 28 de marzo.
La tradicional procesión recorrió las principales calles de la cabecera municipal y después tuvo lugar la homilía de rigor.
Los arreglos florales fueron vistosos, como también los protocolos de organización entre los mayordomos y encargados de esta fiesta anual, que después de un par de años, volvió a reanudarse en este municipio.
“Es muy bonita esta tradición, es nuestra”, se escuchó a una familia que presumía a sus invitados sobre esta celebración que tiene el significativo de encontrarse con Dios, aunque otros pobladores no concuerdan con esa idea, porque el consumo de esta bebida en colectivo es en honor a los tiaxcas.
Aun con los diversos comentarios, decenas de pobladores de San Pedro Cholula se concentran en la Capilla Real de Naturales para compartir más de un litro de pulque.
Como ya es costumbre y también reprobado por algunos, en este evento se logró a observar a varios políticos que desempeñan cargos públicos o buscan alguno en el próximo proceso electoral, aunque varios mayordomos con antelación indicaron que ese panorama debe minimizarse, porque lo importante de esta fiesta es la unión de los diez barrios de esta jurisdicción para festejar a San Pedro de Ánimas y la virgen o el santo que toca presidir la festividad.