Loma Bella fue la primera unidad habitacional que se desarrolló en la ciudad para trabajadores de confianza de diferentes empresas manufactureras y de servicios; sin embargo, la inseguridad desde hace algún tiempo robó la tranquilidad de los colonos y por eso han tenido que organizarse, y buscar protección de diferentes formas.
Alicia Bautista Cano tenía 27 años cuando llegó a las primeras casas que se edificaron, en una de las ocho plazas en la que se encuentra dividida la colonia y que va de la 105 a la 113 Poniente y de la 3 a la 7 Sur. El bebé que llegó con ella en brazos, junto con cuatro más de sus hijos, fue la primera generación de alumnos del preescolar “Abelardo Sánchez Gutiérrez”, quien era empresario.
Y es que la unidad habitacional, según recuerdan los vecinos, fue gestionada por organismos empresariales para sus trabajadores de confianza, que laboraban en empresas como Volkswagen, Alumex, Primex, Acabados Santa Clara, Sears o distribuidoras como Nissan; no obstante, los vecinos coinciden que lo que se acabó fue la tranquilidad.
De acuerdo con Martha Silvia Blanco, presidenta de la Mesa Directiva de la unidad, los habitantes han tomado la decisión de organizarse para repeler la delincuencia común, que es robo de autopartes o a transeúnte, que son ilícitos cometidos por personas conocidas pero que han disminuido después del programa que implementó el Ayuntamiento capitalino en la administración pasada, y que incluía las 25 colonias.
Antonia González Vidal tiene 23 años viviendo en Loma Bella y ella ha notado un aumento en la frecuencia con la que se cometen los robos. Hace unos días asaltaron una pollería, enumeró una carnicería, una estética, un spa y hasta su mismo negocio. Uno de los vecinos que vive frente a su local de comida preparada, fue víctima de un intento de robo de su camioneta.
Un día, cuando la mujer iniciaba sus labores productivas, encontró la cortina de su local sin los candados, al ingresar no se encontraba el tanque de gas; sin embargo, el ladrón fue identificado aunque solo se levantó un acta de hecho.
ANTES JUGABAN HASTA LAS 11
Luz María Martínez llegó a Loma Bella cuando se fundó y fue la plaza Giralda la primera. Las ocho plazas tienen un total de 5 mil viviendas en donde habitan actualmente 7 mil personas, aproximadamente, de acuerdo con datos de la directiva de colonos.
Sin embargo, la mujer que tiene ahora 57 años de edad, comentó que ha sido la organización vecinal la que ha ayudado a mejorar la seguridad, y también, los servicios públicos.
Frente a su vivienda se encuentra una extensión de área verde importante, que no hace poco, había sido invadida por jóvenes que se dedicaban a consumir bebidas embriagantes, y también, sustancias ilegales porque la zona no contaba con mantenimiento.
Tiempo después, a petición de la directiva, llegaron los servicios públicos y se podaron los árboles, ahí se encontraron hasta colchones, pues los consumidores de sustancias lo hacían en ese lugar para no ser vistos.
Ahora los niños no salen de sus viviendas desde las 19:00 horas y si lo hacen en la tarde, siempre es con supervisión, debido al clima de inseguridad que impera pero que no es exclusivo de Loma Bella, consideró Martínez, pues muchas colonias y unidades habitacionales la viven día con día.
Pero, recordó que cuando llegaron los primeros habitantes, los niños jugaban hasta las 23:00 horas del día y no había temor porque ocurriera algún evento delictivo.
LA SEGURIDAD MEJORA
Blanco comentó que desde que inició el programa 4x4 para mejorar la seguridad ciudadana, se notaron los resultados. La colonia actualmente cuenta con 48 alarmas que fueron gestionadas por diputados locales de la actual y la pasada Legislatura, además, cada sección tiene un representante, y también, hay cámaras de seguridad.
“En Loma Bella somos gente de bien”, comentó la presidenta de colonos. Añadió que muchos vecinos, antes de habitar la unidad habitacional, se conocían porque trabajaban en el Centro Histórico muchos de ellos, otros, en empresas manufactureras que se encontraban más alejadas.
No obstante, existe un interés por limpiar la imagen de la colonia, pues reconoce que ha sido vista como insegura, pero la unión de los colonos ha permitido repeler los delitos, aunque existen otros más, como lo ocurrido recientemente a mano armada, que saben que los ejecutan personas organizadas y de lujares ajenos. Blanco siempre carga su silbato y una alarma que se entregó a 40 personas de la tercera edad.