La Arquidiócesis de Puebla condenó la violencia en el municipio de Acatlán de Osorio donde quemaron vivos a dos personas acusadas de secuestro de menores.
El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, sostuvo que la violencia es inaceptable e hizo un llamado a los poblanos para que siempre se dirijan por la vía del diálogo para resolver sus problemas.
“La violencia destruye lo que pretende defender: la dignidad, la vida, la libertad del ser humano. Por ello exhortamos a todos los hombre y mujeres de nuestras comunidades a resolver los problemas que nos aquejan con acciones que hagan de nuestra Puebla un mejor lugar”, dijo.
La Arquidiócesis de Puebla aclaró que el municipio corresponde eclesiásticamente a la Arquidiócesis de Huajuapan de León, Oaxaca.