La legitimidad de un político no depende sólo de su victoria en un proceso electoral, sino también del cumplimiento de sus promesas de campaña y su desempeño en el ejercicio del poder, resaltó el director de la Facultad de Derecho de la UPAEP, Fernando Méndez Sánchez.
A propósito de la jornada electoral por la gubernatura del estado en la mesa de análisis “La participación ciudadana en las elecciones del 2 de junio”, el académico resaltó que independientemente de quién gane los comicios, el reconocimiento a la autoridad va más allá del número de votos que obtenga, sino del grado de aceptación y respaldo que logre de ciudadanos.
Y es que explicó que la legitimidad implica además del voto a favor, de que las políticas públicas que implemente una autoridad sea admitida y apoyada por los ciudadanos y que cumpla con las ofertas que hizo durante su campaña, “la legitimidad no es tan solo un momento de la misma elección, sino del mismo ejercicio”, resaltó.
Por esta razón, agregó, ninguno de los ciudadanos ni de los candidatos debe asumir como resuelta la elección, sino que los primeros valorar su decisión y los segundos hacer las mejores propuestas para ganar el voto de la gente.
En este sentido, Ulises Jorge Orozco Rosas, catedrático de la misma facultad, subrayó que pese a que varias encuestas proyectan a Luis Miguel Barbosa Huerta, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, el resultado de la elección no está definido y los ciudadanos pueden ejercer su derecho y obligación de votar.
Pues enfatizó que los ciudadanos tienen la obligación de participar en los procesos electorales para luego poder exigir a los políticos que cumplan sus promesas, y no sólo hacer manifestaciones a través de otros canales, por ejemplo, de las redes sociales, sin concretar su derecho y obligación.