Las indagatorias por el delito de lesiones teniendo como víctimas a menores de edad aumentaron desde 2018 hasta noviembre de 2023, con un porcentaje al alza de 161.3 por ciento, así lo reveló el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que identificó que los niños y adolescentes hombres fueron los principales afectados.
De acuerdo con el último reporte del organismo federal, correspondiente a datos de enero a noviembre de 2023, el presente año fue el que registró más carpetas de investigación por el delito de lesiones, tanto lesiones dolosas, como culposas, con un total de 541 casos, todo ello del último lustro.
De los 541 casos que se registraron durante el presente año, 407 fueron lesiones dolosas, es decir, que fueron ocasionadas de forma intencional, y el resto fueron culposas, lo que indica que se realizaron de forma involuntaria. Los adolescentes y niños fueron el sector más representativo, con un total de 331 carpetas.
Desde que se tiene registro, que fue el año 2015 y hasta noviembre de 2023, en Puebla se han abierto un total de 3 mil 500 carpetas de investigación por lesiones con víctimas menores de edad. De esta cifra, 2 mil 263 corresponden a hombres, y mil 237 a niñas. Asimismo, 2 mil 628 fueron lesiones culposas y 872 fueron dolosas.
Sin embargo, el aumento más considerable se vio en los últimos cinco años, pues desde 2018, que cerró con 207 carpetas de investigación, para noviembre del 2023 con 541, hubo un porcentaje al alza de 161.3 por ciento.
El Código Penal del Estado de Puebla clasifica las lesiones dentro de los delitos contra la vida y la integridad corporal. Está especificado en el artículo 305 como la acción de hacerle daño a otro, alterando su salud física o mental o que deje huella material en el lesionado.
Al que infiera una lesión que no ponga en peligro la vida del ofendido se le impondrán de 15 días a ocho meses de prisión o multa de cinco a 20 Unidades de Medida y Actualización (UMA), o ambas sanciones. Esto dependerá del veredicto de la autoridad judicial, cuando la lesión tarda en sanar menos de 15 días.
De seis meses a dos años de prisión y multa de 10 a 50 UMA, si la lesión tarda en sanar 15 días o más. Sin embargo, no se detalla si esto incrementa cuando las lesiones son ocasionadas a menores de edad.
En ambos supuestos, sin embargo, se procederá contra el agresor por querella de la parte ofendida, y de oficio si las lesiones son inferidas durante una emergencia sanitaria, epidemia o pandemia a personas que se desempeñen en los servicios de salud, como médicos, personal de enfermería, demás profesionales similares y auxiliares del sector salud, privado o público. En estos casos las sanciones previstas se duplicarán.
Casos en donde los menore de edad se han visto en vuelto en lesiones
En los últimos años, en Puebla, se han visibilizado varios casos donde menores de edad han sido víctimas de lesiones graves. Un ejemplo de ello fue el Yatziri, una niña de siete años de edad que llegó al IMSS de la Margarita, por tener un pulmón colapsado por múltiples golpes, huellas de violación sexual y violencia familiar.
Todo ocurrió en 2020. Yatziri fue víctima de violencia por parte de sus familiares, y de violencia sexual por parte de un tío. Los médicos alertaron a las autoridades que no era la primera vez que ingresaba al hospital, pero hicieron caso omiso.
"Mejor quiero morirme, ya no me curen. No quiero regresar con mis padres para que me sigan pegando” fueron las palabras que Yatziri alcanzó a decir a los médicos cuando fue internada de emergencia.
Debido a que la niña presentó varias lesiones que pusieron su vida en riesgo, fueron detenidos sus padres Alejandra Viridiana N. y Rafael N., acusados por el delito de feminicidio. Posteriormente fue detenida su madrastra Mónica Naxshely N. por ser cómplice y el tío, Ricardo N., por violación equiparada.
Días después, las autoridades dieron a conocer que Yatziri no fue la única víctima de estas personas, ya que, con anterioridad, en el 2012, una de sus hermanas de nombre Mitzi Aidé, que sólo tenía tres años, falleció a causa de un extraño dolor en el estómago. A pesar de su malestar, su padre no la llevó de inmediato a recibir atención médica y murió.
Pese a que se realizaron todos los esfuerzos médicos y humanos para salvar la vida de Yatziri, el 28 de diciembre de 2020 perdió la vida. A través de redes sociales, el Gobierno de Puebla, encabezado en ese entonces por Luis Miguel Barbosa Huerta, lamentó el hecho y anunció que los actos ocurridos con la menor no quedarían impunes.
Otro caso sucedió en octubre de este año, cuando Daniela, una menor de seis años que presentaba síndrome de niño maltratado, murió en la colonia Granjas de San Isidro. El padre que la tenía a su cargo y que presuntamente le habría dado una golpiza, junto con otros tres miembros de su familia, fueron detenidos y puestos bajo investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Todo quedó al descubierto cuando la niña fue llevada a una farmacia sobre la 14 Sur, donde el médico que la recibió indicó que no podía atenderla porque ya estaba sin vida.
Por ello, el cuerpo de la menor fue llevado de regreso a su vivienda, en donde la postraron sobre una cama y le prendieron una veladora, tratando de simular que tuvo una muerte por causas naturales.
Al menos así lo hicieron ver ante las autoridades policiales cuando llegaron para tomar conocimiento, luego de que fueron alertados de lo ocurrido. Los familiares ya tenían lista a una funeraria para que se hiciera cargo de la velación y el entierro.
Sin embargo, los policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) notaron que Daniela tenía diversos golpes en el cuerpo y al cuestionar a los deudos, respondieron que se había caído de las escaleras y eso la llevó a la muerte.
