Emmanuel Vara Zenteno o “Manu”, como le decían de cariño sus familiares y amigos, era un joven fuerte, aguerrido y empático, así lo recuerda su mamá, Luz del Carmen Zenteno, quien reconoció que su vida cambió radicalmente desde el 21 de noviembre del 2018, fecha en la que murió su hijo después de ser atropellado por una unidad del transporte público mientras circulaba en su bicicleta en la ciudad de Puebla.
Luz del Carmen es una mujer de 73 años que padece una discapacidad física y trabaja desde su casa. Pese a las responsabilidades laborales y con las que cuenta en su hogar, se da el tiempo de asistir a las conferencias de prensa de la Asociación Civil que fundó “Manu Vive”, así como de trasladarse a diferentes Congresos de la entidad, la Cámara de Diputados o el Senado de la República por temas relacionados a la movilidad.
Platicó que antes escuchaba a su hijo, quien era arquitecto y jefe del Departamento de Gestión Vial del ayuntamiento de Puebla, hablar respecto a la lucha que mantenía para tener una ciudad más humana y amable con la movilidad, sin imaginar que años después seguiría su camino.
“Yo sentía a mi hijo muy soñador y él me decía: ‘Ay mamá, si todos pensaran cómo tú, qué sería de nosotros, los que pensamos que podemos hacer el cambio tenemos que hacerlo y pedir todo’. Ahora estoy en su misma tónica, siguiendo la lucha tuya que tenía, cuando él debería de esta luchando por esto mismo”, dijo.
La madre del joven recordó que la mañana del 21 de noviembre recibió en compañía de su esposo, Ramón Vara Pizzini, una llamada donde le avisaron que su hijo había sido atropellado, sin que le dieran mayores detalles de su estado de salud, situación que la alertó.
Cuando recordó aquel momento describió que fue una una situación “innombrable” porque ninguna madre quiere perder a su hijo y menos de una forma cruel como la qué pasó el ciclista de 28 años de edad porque el camión le aplastó la cabeza.
“Yo te puedo decir que la muerte de mi hijo vale como la de otra persona que ha fallecido en diferentes circunstancias, que en este caso estamos hablando de siniestros viales. Sin embargo, estoy consiente que ha trascendido, por lo que fue e hizo en vida”, declaró.
De manera gradual la madre del joven comenzó a incursionar en el activismo, un tema en el que participó desde muy pequeño Manu porque formaba parte de grupos, asociaciones y colectivos, con el fin de intentar ayudar a diferentes sectores de la población.
Inició con visitas a la Cámara Alta por invitación de la senadora Patricia Mercado, quien funge como presidenta de la Comisión de Zonas Metropolitanas para trabajar en la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial.
Lo anterior con el fin de retomar la idea de sacar una Ley de Movilidad, misma que fue aprobada el 6 de abril del año pasado y posteriormente publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Relató que, después de ese momento el trabajo ha estado enfocado en la homologación de la ley en el estado de Puebla y opinó que únicamente falta voluntad política para sacar adelante la normativa.
Sus actividades cotidianas comenzaron a dividirse en el trabajo legal sobre el caso de su hijo, la lucha para sacar adelante la ley y la asociación civil.
Reconoció que todavía se pone nerviosa al hablar en el micrófono porque le gana el sentimiento de recordar a su hijo, pero el compromiso que mantiene para honrar su memoria es una situación que le da fuerza, aunque a veces le dan ganas de “tirar la toalla” por las dificultades a las que se ha enfrentado.
Por ello, a veces prefiere que hable su esposo, quien desde su perspectiva, logra mantenerse más firme ante las cámaras.
Además de los padres de Manu, en la asociación civil está Lizeth Mejorada, amiga del joven y que describió como la primera aliada que tuvieron en la causa por el acompañamiento que les ha brindado a lo largo de los años.
También se encuentran Jorge Salazar, Antonio Leal, Andrea Ortiz y Jorge Ortiz.
Hizo una mención especial para Andrea Vara Zenteno, su hija y hermana del ciclista.
Lo anterior porque subrayó que era muy unida con Emmanuel y tras su muerte fue otra de las personas que lo resintió de manera muy drástica.
Inclusive, señaló que mantiene una gran preocupación por ella, debido a que piensa en que, cuando fallezca ella y su esposo, la joven se quedará sola.
En voz de Luz del Carmen Zenteno, el respaldo de las personas de Manu Vive ha sido gratificante porque son familiares y amigos de Emmanuel que se han sumado a la causa con tal magnitud que la defienden con la misma fuerza que Manu luchó en vida.
“Vas encontrando personas y gente muy valiosa, a quienes sientes identificado con el dolor y la causa (…) yo creo que es gratificante”, concluyó.