La liberación del precio de los combustibles programada para elpróximo 30 de noviembre no producirá cambios significativos en elprecio actual de la gasolina y diésel, excepto en regiones comoTepexi de Rodríguez y Teziutlán, donde los costos para sutransporte podrían hacerlos incrementar, estimó la presidenta deGasolineros Unidos de los Estados de Puebla y Tlaxcala (Guept), LuzMaría Jiménez Almazán.
Aunque a partir del último día de este mes ya no será laSecretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), sino cadaempresario gasolinero el que establezca en cuánto venderá cadalitro de gasolina y diésel en su estación de servicio, a decir dela representante de unos 200 de ellos, las variaciones seránmínimas.
Y es que explicó, la venta de los productos deberá cubrircostos como la compra de los propios combustibles, operación queseguirá siendo con Petróleos Mexicanos (Pemex), toda vez que nohay en México otro proveedor y que dará un precio sugerido.
Pero además, resaltó, a este costo habrán de sumar otros,como los de transporte y almacenamiento, que aunque ahora tendránque calcular los empresarios, en la forma de operación quetodavía está vigente también los pagaban.
Por estas razones, la presidenta de Guept consideró quedifícilmente las variaciones en los precios actuales seránmínimas.
“Quisiera que fuéramos sumamenterealistas y que el consumidor no espere grandes descuentos, niguerra de precios, pero tampoco incrementos exagerados, no estamosen condiciones para eso”, subrayó.
Jiménez Almazán explicó que aquellos lugares que esténalejados de Terminales de Almacenamiento y Distribución (TAD) decombustibles y que deban suministrarse de gasolinas y diésel máslejos serán los más susceptibles a que sus precios se incrementeny como ejemplos refirió Tepexi de Rodríguez.
“En Teziutlán no hay ducto, todo el producto llega por ruedas(pipas) entonces es muy caro llevarlo ahí. Tepexi de Rodríguezestá a 200 kilómetros de Puebla, se surte de la terminal queestá aquí en Puebla, entonces inevitablemente el llevar elcombustible será muy caro porque está lejos y no hay manera dellevar el producto que no sea por ruedas”, abundó.
Sin embargo, advirtió, estos costos podrían variar por dosrazones principalmente, la primera relativa al proceso deaprendizaje que tendrán los empresarios gasolineros para hacerestos cálculos, y la segunda, continuó, las pérdidas que puedentener por el robo de las pipas y que a partir del próximo jueves,serán impuestas a ellos.
“Este año sufrimos robo devehículos, secuestro de choferes y aunque el vehículo estáasegurado y una parte se recupera, del producto no hay aseguradoraque nos lo asegure, entonces es una pérdida, un embarque de 20 millitros cuesta un poco más de 300 mil pesos, pero no hay otra formade llevar el producto, por ejemplo, a Tepexi de Rodríguez”,completó.
Finalmente, la presidenta de Guept estimó que será hasta elaño próximo, toda vez que de acuerdo a la reforma energética, esa partir de 2018 que los empresarios pueden comprar combustibles aempresas diferentes a Pemex, cuando podrían diversificarse losproveedores y posteriormente producir cambios en los precios de loscombustibles.