La Ibero Puebla llamó a las autoridades a garantizar la seguridad de las personas buscadoras en la entidad. Además de acatar las recomendaciones que emitió la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Puebla (CDH) por el caso del asesinato de la madre buscadora Blanca Esmeralda Gallardo.
La institución educativa, a través del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría SJ (IDHIE), pidió a la Fiscalía General del Estado (FGE) y al Ayuntamiento de Puebla, atender las recomendaciones del organismo defensor de los derechos humanos, que confirmó la existencia de violaciones a los derechos humanos en el asesinato de la madre buscadora en 2022.
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Mediante una breve postura pública, se pidió a los entes correspondientes tomar las acciones necesarias para garantizar la seguridad de todas las personas buscadoras en la entidad, además de brindarles medidas de protección adecuadas a sus respectivas circunstancias, y dando seguimiento puntual.
Al tiempo que el IDHIE reconoció la inclusión de medidas, solicitó que se acaten en su totalidad, haciendo énfasis en la reparación integral del daño a las víctimas indirectas, particularmente al hijo menor de edad de Esmeralda.
También consideró trascendente que el Cabildo capitalino instituya el Día Conmemorativo de las Madres Buscadoras, como una medida de satisfacción para generar conciencia acerca de las condiciones en las que se encuentran las personas que buscan algún familiar desaparecido.
La institución privada subrayó que la recomendación se da en un marco donde más de 2 mil 700 personas están desaparecidas en la entidad poblana.
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Cabe señalar que Esmeralda Gallardo llevaba un año buscando a su hija Betzabé, desaparecida en Puebla cuando viajaba con su amiga Fabiola Narváez, también desaparecida. La madre fue asesinada a balazos en la Unidad Habitacional Villa Frontera, ubicada en la capital poblana.
En ese entonces, la madre de la joven señaló que su hija pudo ser víctima de trata de personas e incluso señaló a un hombre dedicado a la venta de narcóticos de ser el posible responsable.
A más de tres años de su desaparición, las autoridades no han logrado dar con el paradero de Betzabé y Fabiola.