Las fuertes lluvias que se registraron en la capital poblana a consecuencia del huracán John beneficiaron a los pobladores de San Isidro Tlalcostépetl perteneciente a la junta auxiliar de San Miguel Canoa, donde apenas hace unos meses se quedaron sin el líquido vital para su consumo, por lo que su única fuente era un jagüey sucio que compartían con el ganado.
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En entrevista, Adrián Flores habitante de dicho lugar y en representación de sus vecinos comentó que si bien para algunos ciudadanos dicho fenómeno climático ocasionó muchas afectaciones, para esta comunidad en realidad representó una oportunidad, ya que se recuperó un manantial y un jagüey en la zona.
Apuntó que pese a que solicitaron la ayuda de las autoridades locales para obtener el líquido vital no hubo respuesta, por lo desde mayo hasta finales de agosto tuvieron que ocupar agua contaminada para las actividades domésticas y consumo humano.
Expresó que varias personas se enfermaron del estómago, ya que bebieron el líquido de uno de los jagüeyes que restaba con el cual también sobrevivía el ganado de los habitantes de la localidad. Este estaba sucio, puesto que los animales hacían sus necesidades ahí.
“Solicitamos ayuda para desazolvar un jagüey, ya no teníamos agua y tomábamos de donde consumen las vacas, los toros, los caballos, no teníamos de otra, pero ahorita el agüita nos ayudó mucho”, expresó.
Refirió que tras las fuertes lluvias se acabó la sequía y fue así que volvió a fluir el líquido en el manantial que destinan para que puedan hacer la comida o beber, pues está limpia y fresca.
Además, por ahora mantienen dos jagüeyes a tope y es ahí donde los animales se acercan a tomar agua o los pobladores acuden a lavar la ropa, ya que recordó que no cuentan con agua potable debido a la zona en donde están.
Expuso que aun cuando han pedido en varias ocasiones poder contar con este servicio indispensable no ha habido respuesta, ya que se encuentran en las faldas de La Malinche y se les argumenta que no es posible.
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Por ello y ante la llegada de una nueva administración municipal esperan que el alcalde electo José Chedraui Budib no haga caso omiso de su situación, pues aseguran que el agua que ahora tienen solo les durará hasta marzo del 2025.