Entre evocación de Leticia Ánimas Vargas iniciadora del Programa de Becas Benito Juárez y finada; anuncios de la universalidad de las pensiones para discapacitados con la cooperación del 50 por ciento del gobierno de Puebla y guerra de porras de agremiados al SME, llegó el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Sin mayores filtros de control de seguridad fue la llegada de los centenares de asistentes a la visita del presidente de la República a Huauchinango, Andrés Manuel López Obrador, con el objetivo de supervisar la operación de los programas sociales del Bienestar.
La mediana seguridad que se instaló fue controlada por los empleados de los distintos programas gubernamentales en la región.
A las afueras del recinto ferial, ubicado en la colonia El Potro, ya lo esperaban algunas lonas de bienvenida y para agradecer las 9 mil jubilaciones para los afectados por la liquidación de la empresa, Luz y Fuerza del Centro (LyFC) a casi 13 años del decreto presidencial de Felipe Calderón Hinojosa.
Lo integrantes del denominado Frente Amplio Unido de la disidencia del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), además indicaron que están a favor de la nacionalización de la industria eléctrica.
Además hubo "guerra" de porras del a la democrática y oficialista para poder llegar a los oídos de Andrés Manuel López Obrador.
El recibimiento del ejecutivo federal fue a la usanza tradicional, con un enfloramiento en un ritual indígena Náhuatl.
El aplauso para los dos mandatarios, considerando al gobernador de Puebla, Sergio Salomón Cespedes Peregrina, fue cuando López Obrador, anunció que acordaron hacer universal la pensión para personas discapacitadas.