La elaboración de un desayuno escolar sin nutrientes puede provocar un bajo rendimiento escolar y a largo plazo padecimientos como obesidad, sobrepeso y hasta diabetes o hipertensión, confirmó Diana Cuoto Roldán, nutrióloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Por lo anterior en entrevista dio a conocer la necesidad de elaborar desayunos escolares adecuados a la edad de los menores, pues no deben exceder las calorías recomendadas. Asimismo, señaló que un platillo bien preparado puede brindar la energía correspondiente a los pequeños durante todo el día.
Sostuvo que en muchas ocasiones los principales pretextos de los padres de familia o tutores son que no existe el tiempo necesario para elaborar los desayunos por la mañana, sin embargo, señaló que hay estrategias para alimentar bien a los menores y gastar el menor tiempo posible.
“Existen las recomendaciones para preparar un lunch rápido, en 15 minutos. Lo que pueden hacer es que en fin de semana se anticipen a hacer compras, sobre todo de frutas y verduras, y hacer preparaciones previas”, dijo.
Es decir, explicó, que durante el fin de semana se realizan las compras y es posible realizar el lavado y desinfección de frutas y verduras. Si el padre de familia cree que no tendrá aún menos tiempo para la preparación pude colocar en recipientes los alimentos y elegir uno cada día.
El lunch debe ser un alimento ligero que se tiene que consumir al mediodía para que la persona esté dotada de energía hasta el siguiente periodo de alimento. Si el menor no se nutre adecuadamente, además de que no tendrá energía, podrá desarrollar algunos padecimientos a largo plazo, como obesidad, sobrepeso y otras enfermedades crónicodegenerativas.
Se recomienda que durante este alimento los niños de preescolar no consuman las 228 kilocalorías recomendadas, los de primaria 276 y en secundaria las 400, por lo que señaló que el lunch debe contener vitaminas, minerales y productos de origen animal.
LOS ERRORES
Comentó que una de las principales faltas que se cometen al momento de elaborar un desayuno escolar es colocar alimentos procesados (como embutidos, harinas y azúcares) que no permitirán que el menor cuente con la energía correspondiente durante el día.
“No es recomendable que los niños consuman embutidos a cualquier edad, ya sean niños en preescolar, primaria o secundaria. Esto por la gran cantidad de químicos y conservadores”, dijo.
Tampoco se tienen que utilizar los aderezos como cremas o mayonesas porque los niños tienen capacidad para una cantidad muy pequeña de alimentos y las papilas gustativas se van acostumbrando a estos alimentos.
La peor de las recomendaciones es darle dinero al pequeño para que él elija qué es lo que quiere comer, porque no tomarán las mejores decisiones.