Desde autoridades municipales hasta dependencias federales como la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), todos fueron burlados por más de cinco años por Marylin Cote, quien se hacía pasar como psiquiatra y presumía ser “la mejor especialista de Estados Unidos y Países Bajos”.
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Cote mantuvo actividad como psiquiatra en un consultorio de las Torres Médicas, ubicadas en el Periférico Ecológico 3507, en territorio del municipio de San Andrés Cholula, sin que alguna autoridad e incluso la administración del edificio, reconocido por alojar a gran número de profesionales de la salud, se percataran de que presumía títulos y cédulas falsas para promoverse como alguien con experiencia y formación internacional.
Cualquier médico o profesional de la salud que busca habilitar un consultorio para ofrecer sus servicios de forma particular está obligado a acudir a la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios (DEPRIS) para tramitar la licencia de funcionamiento y debe cumplir con requisitos como título y cédula.
Marilyn no tramitó su licencia
Sin embargo, Marylin simplemente nunca tramitó esa licencia y esto no impidió que las Torres Médicas permitieran el funcionamiento del consultorio. Tampoco hubo autoridad que lo detectara hasta que su estafa se dio a conocer a través de redes sociales, en donde fue evidenciada por falsificar títulos y extender recetas con el logo de Harvard.
La mujer en realidad es abogada egresada de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), maestra en criminalística por el Colegio Libre de Estudios Universitarios y doctora en psicología por la Escuela Libre de Psicología pero ninguno de estos títulos figuraba en las recetas que extendía o las publicaciones con las que se daba a conocer.
Fue la cuenta de X “Charlatanes Médicos” la que exhibió a la falsa psiquiatra, difundiendo imágenes de documentos en los que Cote presumía formación internacional usando los logos de las universidades de Harvard y Oslo, así como recetas en las que administraba medicamentos controlados y para tratar trastornos depresivos de gravedad a sus pacientes.
A partir de que el caso se hizo público, las autoridades sanitarias acudieron a las Torres Médicas a realizar una supervisión, incluso la Cofepris respaldó dichas acciones que derivaron en la clausura del consultorio de Cote, mientras que la Fiscalía General del Estado (FGE) inició investigaciones por su presunta responsabilidad en el delito de usurpación de funciones.
La abogada tiene como plazo el próximo jueves para presentar los documentos que acrediten su formación académica y demás requisitos que le permitan mantener activo su consultorio o de lo contrario este será clausurado de forma definitiva. Por otra parte, seguirá avanzando la investigación de la FGE en su contra.