Uno de los retos que enfrenta la comercialización del café de América Latina es alcanzar una mejor calidad y separarse del volumen, dijo René León Gómez, encargado de la Secretaría Ejecutiva de Promecafé.
Algunos de los problemas que enfrenta la producción del aromático, no solo en México sino en toda la región, son bajos precios, poca rentabilidad del productor, además del cambio climático, por eso es fundamental el trabajo con las instituciones públicas.
El representante del Programa Cooperativo Regional para el Desarrollo Tecnológico y la Modernización de la Caficultura de Centroamérica, República Dominicana y Jamaica –Promecafé- explicó que la producción de café de las naciones de América Latina, representa el 25 por ciento del total que se distribuye en el mundo de tipo arábigo.
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“Creo que México, al igual que los demás países de la región ha estado viviendo una situación difícil, lo mencionamos, tenemos retos muy importantes, los bajos precios son uno de esos retos, la poca rentabilidad que está teniendo el productor, el tema de la sostenibilidad ambiental, el cambio climático, todo eso complica, yo creo que México está viviendo una situación muy parecida a la que vivimos todos los países”, comentó.
Durante la conferencia Magistral que impartió en la Cumbre Latinoamericana del Café, el especialista resaltó que a pesar de la situación complicada por el tema de los bajos costos, existe un impulso importante por parte de las mismas instituciones.
No obstante, en la región se han dado casos en los que existe abandono de tierras y fincas, mismas que pueden recuperarse en la medida en que las condiciones para los cafeticultores mejoren.
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Destacó que el tema de los bajos precios es complicado, ya que la región de América Latina se ha caracterizado por producir café en volumen, pero es fundamental, comenzar a trabajar en mejorar la calidad del aromático.
“Quizá lo que podemos hacer como países productores es separarnos de esa comercialización de volumen, a nivel de la bolsa, lo que esperamos es que podamos distinguirnos por esa calidad, por esos atributos, tener precios diferenciados, ojalá en algún momento pudiéramos lograr una nueva bolsa o mercado que comercialice el café de calidad, que ya no sea el contrato C, sino Q de calidad que nos distinga a nosotros, estamos soñando con separarnos de esos volúmenes grandes”, resaltó.