Los mercados de la ciudad de Puebla son algunos de los puntos donde se vende alcohol sin los permisos correspondientes, informó el coordinador de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), Eduardo Alcántara Montiel, por lo que, podrían verse afectados si el Congreso de Puebla aprueba la reforma que presentó para castigar con cárcel a las personas que venden bebidas alcohólicas fuera de la ley.

Los primeros días de diciembre, el legislador local del albiazul presentó una propuesta de reforma con el fin de regular los establecimientos que comercializan alcohol y evitar que ocurra otro suceso como el Halloween donde un grupo de estudiantes de preparatoria de la BUAP resultaron intoxicados por presuntamente ingerir bebidas alcohólicas adulteradas.

Posterior a ello, el diputado local ha canalizado a través de sus redes sociales los negocios donde venden alcohol sin permisos. En entrevista, informó que tras el contacto con la ciudadanía ha detectado que la problemática persiste principalmente en los mercados.

Enlistó que algunos de ellos son el mercado Hidalgo, Zaragoza, Morelos y el que se encuentra ubicado en la zona de los Héroes. Asimismo, explicó que en lo e respecta a los tianguis se encuentra el de San Isidro y “Los Lavaderos”.

Informó que otra modalidad recurrente para vender alcohol sin permisos es a través de las cocheras de los hogares y en algunos casos las personas se excusan de pagar los permisos bajo el argumento de que son un emprendimiento.

Desde la óptica del diputado, la venta de alcohol sin permisos pone en riesgo a la gente que lo consume porque no se cumple con los estándares de seguridad, es una competencia desleal contra los negocios que invierten en sacar sus permisos y da pie a otros delitos como los accidentes automovilísticos y la violencia intrafamiliar.

“Es un problema también porque el alcohol se acaba asociando con otros temas como los accidentes automovilísticos, violencia intrafamiliar, diferentes circunstancias que pueden ir generando un delito”.

Opinó que la proliferación en los negocios que venden alcohol sin permisos es porque existe una omisión de parte de la autoridad municipal.

“El problema es que es algo generalizado y hay omisión de la autoridad. Es muy simple, no tienen permiso y no están pagando, además, también es un comercio desleal para los establecimientos que están pagando”.

La propuesta del legislador busca que los distribuidores de las bebidas sin los permisos o las licencias correspondientes serán acreedores a una sanción de tres a seis años de prisión y una multa de 200 a 500 Unidades de Medida y Actualización (UMAS). Las penas para los funcionarios públicos que sean omisos ante los reportes de los ciudadanos en ese tema irían de los dos a los cinco años de cárcel, además, también se le interpondrían las responsabilidades administrativas correspondientes.