Con 61 por ciento de las mujeres en el estado que no manifestaron tener ingresos propios, la entidad poblana ocupó el tercer lugar a nivel nacional en la menor fuerza laboral femenina; sólo después de Chiapas (66) y Estado de México (64).
Es así que en Puebla únicamente se contaron un millón 482 mil 446 mujeres con ingresos propios en comparación con las 930 mil 332 que declararon contar con ingresos de un trabajo remunerado; además de un millón 140 mil 772 mujeres ocupadas.
De acuerdo con el informe de la organización Acción Ciudadana Frente a la Pobreza; Barreras. Reporte Especial sobre Exclusión Económica y Precariedad Laboral de las Mujeres en México, Puebla estuvo por encima de la media nacional en cuanto a las condiciones precarias de trabajo para las mujeres.
Pues la organización señaló que del 43 por ciento de la participación que tuvieron las mujeres en el mercado laboral, 78 por ciento no cuenta con seguridad social y 76 por ciento de las trabajadoras no tiene ingresos suficientes para mantener a una familia de dos personas.
Acción Ciudadana Frente a la Pobreza recopiló los datos al cierre del primer trimestre de este año del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) para determinar la precariedad laboral en la que se encuentran las mujeres del país.
En ese sentido se reveló que la precariedad laboral de las poblanas ubicó al estado en el segundo puesto a nivel nacional con respecto a las trabajadoras sin ingresos suficientes, así como en el tercer lugar quienes no tuvieron ingresos propios y el quinto sitio en el país al no contar con seguridad social.
La organización denunció que la falta de autonomía económica, la precariedad de los empleos y la brecha salarial entre hombres y mujeres son un factor de riesgo que coloca a las mujeres en situación de vulnerabilidad frente a la violencia de género.
Además de que la pandemia del Covid-19 agravó las dificultades a las que ya se enfrentaban las mujeres para ingresar y sobreponerse en el mercado laboral, pues hizo visible que se dedican a dobles jornadas al seguir a cargo de tareas domésticas y de cuidados.
Finalmente, el informe de Frente a la Pobreza explicó que, si las mujeres desearan ganar lo mismo que los hombres, deberían trabajar años de 13.5 meses, o de 14 meses con la intención de cubrir el costo de la canasta básica para dos personas.