Las y los integrantes del Observatorio 33 reconocieron que son las mujeres quienes más violencia política de género ejercen contra otras mujeres, pues de los ataques detectados por esta organización en redes sociales y medios de comunicación, el 60 por ciento son realizados por el género femenino y el 40 por ciento restante por hombres.
Así lo expuso Edurne Ochoa, una de las 33 integrantes de este observatorio, el cual fue presentado con el objetivo de vigilar y documentar todo tipo de agresión durante el proceso electoral para exigir que se tipifique la violencia política de género.
"Desafortunadamente de mujeres se da muchísima violencia, yo te podría decir que el 60 por ciento mujeres y el 40 por ciento hombres", comentó en rueda de prensa.
Por su parte, Cecilia Monzón, también integrante de Observatorio 33, argumentó que este tipo de conductas son adquiridas desde casa y escuela, donde dijo no se enseña a las mujeres a hacer equipo como a los hombres.
"Es un tema que aprendimos todas en todos los ámbitos. Es una forma en la que estamos educadas desde casa, la escuela, la sociedad, etcétera, a que nosotras no hacemos equipo como los hombres, nosotras no jugamos futbol, nosotras competimos desde pequeñitas y tenemos que irlo cambiando".
Independientemente del género que propicie más violencia contra las mujeres, las y los integrantes del observatorio coincidieron en la importancia de que la violencia política de género se tipifique para contar con un marco legal que permita la sanción de este tipo de conductas.
Edurne Ochoa informó que después de 5 meses de monitorear las redes sociales se ha detectado fan page y perfiles exclusivos para denostar a las mujeres por su género, que arrojan hasta 17 cuartillas diarias de textos, conversaciones, fotos y memes con mensajes de violencia.
Entre las mujeres que forman parte del escenario político poblano y fueron víctimas de violencia en redes sociales mencionaron a Violeta Lagunes Viveros, Martha Erika Alonso Hidalgo, Karina Romero Alcalá, entre otras.
Aclaró que en casos como el de la candidata del PAN a la gubernatura de Puebla, Martha Erika Alonso Hidalgo, se puede enfatizar sobre la relación con su esposo, Rafael Moreno Valle, o el grupo político al que pertenece, siempre y cuando no se omita su nombre, ya que “invisibilizar” también es un tipo de violencia.