Las mujeres son las principales víctimas de trastornos de la tiroides, esa glándula que puede afectar la menstruación, el peso corporal y el ritmo cardiaco. Especialistas estiman que hasta seis de ellas enferman por cada hombre, sin embargo, con todo y las consecuencias que provoca, es una enfermedad de la que se hace poca estadística, ya que no está incluida en los reportes epidemiológicos de la Secretaría de Salud y regularmente se registra como antecedente de un tipo de cáncer.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que hasta un 10 por ciento de la población en el mundo puede desarrollar alguna patología tiroidea, además de que seis de cada 10 afectados ignoran que la padecen porque suelen confundir sus síntomas con los de otras enfermedades, como la depresión o la ansiedad, lo que termina por complicar su situación de salud.
En el marco del Día Mundial de la Tiroides, que se conmemora este día, las autoridades sanitarias hacen énfasis en la importancia de que los ciudadanos conozcan las funciones y principales patologías que puede presentar esta glándula, ya que un diagnóstico temprano puede salvar la vida de las personas.
Los médicos Eduardo López Villalobos y Venus Santos Tiempo señalaron que la mayoría de los casos son provocados por factores genéticos y hereditarios, aunque también los malos hábitos y vicios pueden provocar alteraciones en la glándula
¿QUÉ ES LA TIROIDES?
Es una glándula endócrina que tiene forma de mariposa y se ubica en el centro del cuello. Cumple múltiples funciones, de entre las que destacan el almacenamiento y la liberación de hormonas que circulan en la sangre y que resultan indispensables para regular la frecuencia cardiaca, el metabolismo, la temperatura corporal, el tracto gastrointestinal, la memoria y el peso corporal.
El médico Eduardo López destacó que las funciones de esta glándula son de vital importancia para la salud, ya que coadyuva en el crecimiento, la regulación del metabolismo, la frecuencia cardiaca e incide en la regulación del sueño, el hambre e incluso en el carácter.
¿POR QUÉ OCURREN LOS TRASTORNOS DE LA TIROIDES?
López y Santos explicaron que los trastornos de la tiroides regularmente son hereditarios, ya que son provocados por la carga genética, motivo por el que las personas con familiares que tienen algún tipo de patología son más propensas a desarrollarlos y, por ende, deben estar más atentos a posibles síntomas.
“Actualmente ya es posible identificar posibles riesgos desde los primeros días de vida, ya que se hacen tamizajes a los recién nacidos en los que se detectan posibles padecimientos según su carga genética, pero, por ejemplo, las personas mayores todavía no tuvieron acceso a esas pruebas y deben estar pendientes de su salud para detectarlo a tiempo”, explicó el doctor Eduardo.
En tanto que el otro galeno sostuvo que la tiroides también puede verse afectada por el tabaquismo, la exposición a la radiación, el sobrepeso y obesidad, así como por una mala alimentación, con altos contenidos de yodo.
Destacó que regularmente la ciudadanía asocia a la tiroides con síntomas como el exceso de peso y los ojos saltados en las personas; sin embargo, enfatizó que se trata de una glándula que puede generar diversos trastornos, incluso el cáncer, por lo que los síntomas son diversos y por ende los tratamientos.
TIPOS DE PATOLOGÍAS TIROIDEAS
El hipotiroidismo es el trastorno más frecuente de la tiroides y es provocado por una disminución de las hormonas tiroideas, “generalmente produce fatiga, constipación intestinal, resequedad en la piel, aumento de peso inexplicable y pérdida del cabello”, explicó López.
Agregó que enseguida se encuentra el hipertiroidismo que, contrario a lo anterior, se manifiesta en la pérdida de peso inexplicable en el paciente, latidos rápidos del corazón con propensión a taquicardia, arritmias cardiacas, irritabilidad y sudoración, ya que se trata de un exceso de hormonas tiroideas en el cuerpo.
El doctor explicó que otra patología es el bocio, que se caracteriza por el crecimiento de la glándula tiroides en forma de nódulos, lo que va a producir inflamación y tos en el paciente, aunque no siempre se manifestaran síntomas.
Agregó que de este último trastorno también podría derivarse el bocio tóxico difuso, en el que el paciente experimenta síntomas como los ojos saltados, además del resto de los que ocurren en el hipertiroidismo.
Por su parte, Venus expuso que las patologías pueden ir desde nódulos tiroideos que son benignos, tiroiditis, que se traduce como la inflamación de la glándula, hasta el cáncer que, como cualquier otro tipo de tumor maligno, afecta gravemente al paciente porque pone en riesgo su vida.
¿CÓMO DETECTARLA?
Ambos especialistas señalaron que la sintomatología es diversa cuando se trata de la tiroides, según la patología que esté desarrollando el paciente, no obstante, indicaron que hay algunos signos de alerta a los que se debe prestar atención pues para identificarlos basta con tocarnos el cuello de forma periódica.
“Cuando empiezan a aparecer, por ejemplo, nódulos, se pueden sentir si nos tocamos el cuello, o a veces se nota al ponernos frente al espejo, simplemente es tener ese hábito, así como las mujeres se auto exploran para detectar anomalías en los senos, así podemos tocarnos el cuello para verificar que no haya un crecimiento anormal”, comentó López.
En tanto que Santos apuntó que ante los primeros síntomas de alguna de las patologías descritas es importante acudir al médico para que se haga una valoración, ya que cuando no se atienden a tiempo estos trastornos se ven afectados otros órganos, como el corazón, los huesos y los ojos.
¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO?
Los médicos resaltaron que el paciente con problemas de tiroides debe ser consciente de que su enfermedad no se cura, pero debe ser controlada y tratada a tiempo para evitar que su salud se vea deteriorada de forma más rápida, debido a que, como ya se expresó, afecta a otras partes del cuerpo.
En este sentido, Eduardo López señaló que regularmente se suministran medicamentos para controlar o sustituir las funciones de la glándula y es de vital importancia que el tratamiento sea constante.
“Esto es de por vida. No hay un momento en que se pueda decir que el paciente ya está bien. Una vez que se desencadena de por vida se tiene que llevar un control y un tratamiento, pero este siempre va a ser más leve cuando se detecte en fases tempranas”, acotó.
Ambos médicos manifestaron a manera de conclusión que durante la pandemia de la Covid - 19 incrementaron los casos de ansiedad y depresión y muchos de los síntomas como la irritabilidad, la ganancia o pérdida de peso pudieron ser en realidad efectos de una alteración en la tiroides, de tal forma que es importante acudir a una valoración médica.
Refirieron que la confusión de los síntomas o pasarlos por alto provoca que al menos el 60 por ciento de las personas enfermas de esta glándula no lo sepan y, en consecuencia, no reciban el tratamiento que podría mejorarles o, incluso, salvarles la vida.