“El PRI no va a encubrir a nadie y no es abogado de nadie”, comentó el dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Néstor Camarillo Medina, sobre los señalamientos en contra del presidente municipal de Zapotitlán de Méndez, Emiliano Vázquez Bonilla, y aseguró que si es responsable de disparar un arma de fuego contra escuela deberá responder ante las autoridades.
Tras los hechos que acusan al edil de estar en presunto estado de ebriedad y accionar un arma de fuego en contra de la primaria Juan Nepomuceno Méndez, en la que se encontraban infantes y docentes, el también diputado local lamentó los acontecimientos y consideró prudente esperar los resultados de las investigaciones que emprende la Fiscalía General del Estado (FGE).
“No somos abogados de nadie, todos tienen una responsabilidad en el ámbito estatal y municipal. Ya sostuvo el área jurídica comunicación con el alcalde y manifiesta que no tuvo nada que ver. Él podrá argumentar una cosa y los habitantes otra y al final la Fiscalía será la encargada de deslindar responsabilidades”, comentó.
Explicó que, ante el área jurídica, el edil se deslindó de los acontecimientos ocurridos e incluso expuso que hay un grupo de ciudadanos que no lo respaldan y fueron quienes “incitaron a la población y metieron presión a los regidores de Cabildo de una supuesta destitución”.
Camarillo Medina expresó que una vez que la FGE determine si existe una responsabilidad, el edil tendrá que responder ante la justicia y en caso que no sea así los habitantes deberán tener la certeza que su presidente municipal no cometió una falta.
“Confiamos en la Fiscalía, el mismo alcalde deberá tomar una determinación para esclarecer los hechos y que la comunidad quede conforme; separarse o no (del cargo) será una decisión que tome el alcalde”, expresó.
Hay que recordar el alcalde de Zapotitlán de Méndez fue señalado por los habitantes de presuntamente disparar en contra de la escuela primaria del municipio estando bajo los influjos de bebidas alcohólicas.
El priista argumentó que el día que ocurrieron las detonaciones no se encontraba en la cabecera municipal, sino que estaba en una localidad en la que ni siquiera había recepción de señal para su teléfono celular.