El presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Puebla, Félix Cerezo Vélez, catalogó como falso el informe presentado por el instituto Ignacio Ellacuria de la IBERO, en el que se denuncian tratos inhumanos para los migrantes retenidos, ya que afirmó que durante las intervenciones de la CDH no ha habido ninguna denuncia formal al respecto.
En entrevista con El Sol de Puebla, señaló que el personal de la Comisión implementa un protocolo de atención a migrantes cada que se notifica la retención de personas en la entidad y hasta el momento no ha habido alguna persona en esta condición que reporte maltrato.
“Eso es falso, lo que ellos han sacado de instalaciones de Xonaca, donde hay migrantes nicaragüenses, no es cierto, nosotros acompañamos. No es una estación de retención, sino solo para dormir y les dan comida, entonces no es cierto que a ellos les estén violando sus derechos humanos, nosotros investigamos esos casos y no hay ninguna queja de ellos, eso es falso”, dijo.
El informe “Vidas en contención: privación de la libertad y violaciones a los derechos humanos en estaciones migratorias de Puebla - Tlaxcala 2020 - 2021”, revela que al 54 por ciento de las personas detenidas no se les hicieron saber sus derechos y obligaciones dentro de las instalaciones y el 95 por ciento no tuvo oportunidad de leer los documentos que firmó a su ingreso.
Otras violaciones a derechos humanos reportadas fueron que no se respeta el aforo para prevenir contagios de la Covid - 19 ni el tiempo de estancia, que es de máximo 15 días, además de malas condiciones de las colchonetas que se les prestan para dormir.
Cuestionado al respecto, el titular de la CDH dijo que el personal realiza visitas a la estación migratoria para vigilar que se respeten los protocolos de atención a migrantes en cuanto a estadía y servicios, además de que no haya niños o niñas en las instalaciones porque las reformas realizadas recientemente indican que deben ser resguardados por el sistema DIF.
Añadió que en la estación migratoria se ofrece asesoría puntual a las personas para que decidan si desean tramitar una visa humanitaria para permanecer en el país, o bien, ser deportados a sus lugares de origen, aunque en la mayoría de los casos la solicitud es la primera.
“Una vez que sabemos que son detenidos, rescatados y son llevados a las estancias migratorias, acudimos con ellos y los asesoramos, auxiliamos, para que si quieren hacer un trámite migratorio damos a vista a ACNUR a COMAR y ellos intervienen para si quieren pedir asilo político o en su caso refugio, ellos tienen que ajustarse a ese protocolo”, concluyó.