Después de que el ex gobernador poblano Mario Marín Torres tramitó un juicio de Amparo en contra del auto de formal prisión que le fue dictado en su contra, el Juzgado Segundo de Distrito otorgó la suspensión provisional pero para efectos de turnar el caso al Juzgado Tercero de Distrito que el próximo 18 de marzo resolverá la situación legal del acusado de tortura contra la periodista Lydia Cacho.
Como se recordará Marín Torres fue detenido el 3 de febrero en el puerto de Acapulco, en el estado de Guerrero; de ahí fue trasladado e internado en el penal estatal de Cancún, Quintana Roo, donde a la fecha permanece encerrado.
Al día siguiente, la autoridad judicial que lo requirió le dictó auto de formal prisión y aunque la defensa legal trató de solicitar como medida cautelar prisión domiciliaria, argumentando que corría el riesgo de infectarse de Covid-19, pero le fue negada la petición.
Por ello, los abogados tramitaron un juicio de Amparo en contra del auto de formal prisión y con el fin de lograr su pronta liberación, en el Juzgado Segundo de Distrito, pero el pasado 11 de los corrientes, la autoridad judicial federal emitió como resolución la suspensión provisional, es decir concedía la protección de la justicia a Marín Torres, pero solo para efectos de declararse incompetente del caso y turnar el expediente al Juzgado Tercero de Distrito, quien resolverá de manera definitiva la situación legal del ex mandatario el próximo jueves.
Al político poblano la FGR lo acusa, junto con otras siete personas, de crear una estructura organizada de poder para favorecer a Kamel Nacif quien se encuentra prófugo de la justicia.
De las investigaciones se desprende que el empresario instigó al ex mandatario, aprovechándose que apoyó económicamente su campaña para ser gobernador, para que castigara a Lydia Cacho por sus publicaciones y entrevistas.
Para su ubicación y detención, la FGR creó un grupo de trabajo especial que incluyó analistas de información, policías y agentes del Ministerio Público, quienes retomaron una investigación olvidada y desatendida en años pasados.
Desde el 2019 Mario N, era buscado por un grupo de inteligencia de ministerios públicos y elementos federales, y se le siguió el rastro por los estados de Puebla, Morelos y Guerrero, en donde finalmente fue capturado por el grupo especial en cumplimiento a una orden de cateo obtenida por el Ministerio Público el día anterior.