El proceso interno para renovar la dirigencia nacional del PRI provocó que liderazgos poblanos de ese partido olvidaran las traiciones que priistas como Leobardo Soto Martínez, Vanessa Barahona de la Rosa, Maritza Marín Marcelo y Francisco Jiménez Huerta cometieron en el pasado proceso electoral al apoyar a Morena, pues llamaron a la unidad para apoyar al candidato Alejandro Moreno Cárdenas, mejor conocido como “Alito”.
En rueda de prensa, los ex candidatos del PRI a la gubernatura, Alberto Jiménez Merino y Enrique Doger; los exdirigentes estatales del partido, Valentín Meneses Rojas y Javier Casique Zárate; así como la coordinadora de regidores priistas en el Ayuntamiento de Puebla, Silvia Tanús Osorio, convocaron a todos los priistas para que el próximo 11 de agosto apoyen a la fórmula encabezada por “Alito” y Carolina Viggiiano Austria.
El llamado a la unidad fue dirigido a los más de 600 mil priistas registrados en el padrón de afiliados, incluidos aquellos que en la pasada elección apoyaron al hoy gobernador electo, Luis Miguel Barbosa Huerta.
Uno de estos priistas fue el líder estatal de la CTM, Leobardo Soto Martínez, quien después de operar para Morena en la pasada elección, hizo público su respaldo a favor de Alejandro Moreno en la contienda por la dirigencia nacional del tricolor.
Aunque Jiménez Merino fue el candidato del PRI a la gubernatura en la pasada elección, afirmó que no hubo traición por parte de Leobardo Soto porque nunca espero nada a cambio y reconoció que ninguno de ellos ha promovido un proceso de expulsión contra los traidores, pues dijo que eso es competencia de las instancias correspondientes del partido.
“Nosotros no estamos promoviendo ningún proceso de expulsión, el partido se encarga si hay alguna queja de algún militante, nuestro partido se encargará, nosotros hoy estamos promoviendo la unidad. A mí nadie me ha traicionado porque todo lo que yo doy, todo lo que he apoyado lo he dado sin esperar nada a cambio”.
No fue el único caso en este proceso, pues Jiménez Merino también compartió la rueda de prensa con el también ex candidato del PRI a la gubernatura en 2018, Enrique Doger Guerrero, quien en la última elección consideró un error la nominación de su compañero de partido y advirtió que el tricolor estaba condenado a obtener la votación más baja de su historia.
“El proceso ya terminó, es un asunto que quedó atrás, ahora estamos concentrados en la elección de la dirigencia nacional. Ya habrá tiempo de hacer balances, tanto de la elección en que me tocó competir como la de este año, pero por ahora mantener la unidad, todos los liderazgos son valiosos”, justificó Doger Guerrero..