Bajo el argumento de que la verificación vehicular obligatoria es innecesaria, costosa, y de que la contaminación atmosférica es mayormente causada por actividades industriales, inclusive por el volcán Popocatépetl, y no por automóviles, un limitado grupo de al menos 50 ciudadanos bloqueó por momentos la circulación sobre el bulevar 5 de Mayo, a la altura de la 14 Oriente.
Hasta el cierre de esta edición, el tránsito sobre esta importante arteria vial que atraviesa la zona centro de la capital poblana quedó libre. No obstante, hasta las 2 de la tarde de este viernes, vehículos particulares, así como unidades del sistema Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) se detuvieron totalmente, por lo que sus pasajeros tuvieron que continuar su travesía a pie.
Aunado a ello, ante la ausencia de elementos de Tránsito Municipal que coordinaran el paso de automóviles, algunos automovilistas provenientes de la 14 Oriente, con el objetivo de esquivar el bloqueo, atraviesan con sus vehículos incluso por las banquetas que se encuentran en esta calle.
Fue poco antes del mediodía, los inconformes contra esta medida gubernamental se aglutinaron a un costado del Paseo Bravo, sobre la avenida Reforma y la 11 Norte. Desde ese lugar caminaron por las calles del centro histórico de Puebla hasta llegar al Congreso del Estado, ocasionando cortes paulatinos a las vialidades del corazón de la ciudad.
Posteriormente caminaron hacia el zócalo capitalino, y luego hacia el bulevar 5 de Mayo, a través de la avenida Juan de Palafox y Mendoza, donde fueron escoltados por patrullas de la Policía Estatal y de la Policía Municipal.
Con pancartas con textos como “Di no a la verificación vehicular y al pase turístico”, así como con consignas como “Fuera las empresas que contaminan el aire y los ríos”, la agrupación ciudadana caminó sobre las calles capitalinas. Algunos iban a pie, mientras que otros viajaban a bordo de una camioneta antigua con un altoparlante, y también en motocicleta.
Este diario buscó entrevistar a algunas de las personas que formaron parte de dicho contingente, con el objetivo de ahondar más en sus razones contra el trámite medioambiental.
Aunque la negativa a participar en esta pieza editorial persistió en la mayoría, algunos ciudadanos –quienes se negaron a compartir su nombre– acusaron que la medida no es “honesta”, al referir que su finalidad no es aminorar el deterioro ambiental en realidad, pues expusieron que hay empresas que vierten desechos a ríos como el Atoyac y que, además, expelen sustancias tóxicas a la atmósfera y no son sancionadas por la autoridad. Incluso le achacaron la polución del aire a las diversas expulsiones de vapor y ceniza que el Popocatépetl ha hecho durante los últimos días.
También indicaron que el número de centros de verificación vehicular, que es de 16, es insignificante e insuficiente ante las necesidades reales del parque automotriz en Puebla.
Por su parte, Rogelio, propietario de un jetta modelo 2007, relató que su vehículo es su principal instrumento de trabajo, y consideró que el costo del trámite ecológico es alto. Por esta razón, indicó que buscará que a personas como él se les beneficie con una prórroga o que se cancele por completo la medida, pues argumentó que su economía fue afectada por la pandemia de Covid-19.
Uno de los hombres que tuvo el uso de la voz, identificado como miembro de la Caravana de Productores y Ciudadanos en Atlixco, compartió a sus compañeros que se requiere agrupar a más personas, pues es necesario que las autoridades estatales hagan caso a sus peticiones. Inclusive, señaló que se requiere trasladar el ánimo de manifestación a otros municipios.
Por ello, los manifestantes anunciaron que el próximo domingo 22 de enero habrá otro desplazamiento ciudadano, partiendo de El Gallito, en el que se espera convocar a personas que radican al interior del estado.
Finalmente, cabe recordar que esta no fue la primera vez que este grupo de personas se manifiesta por esa razón. El domingo pasado se llevó a cabo otra movilización, en la cual, amagaron con convocar a una “megamarcha” para días posteriores, sin embargo, la misma no se cumplió. El pasado 13 de enero ocurrió otra manifestación, empero, esta fue liderada por transportistas y operadores de vehículos de plataformas como Uber y DiDi.