Miembros de las organizaciones Civilitas, Frente Nacional por la Familia e Iniciativa Ciudadana manifestaron su preocupación ante la iniciativa de castigar las terapias de conversión en el estado de Puebla.

Padres de familia acompañados de líderes religiosos arribaron este miércoles al Congreso del Estado de Puebla para presentar su posicionamiento en contra del dictamen que declaran, es una amenaza contra los derechos humanos de los individuos.

Los protestantes alertaron que la iniciativa de sancionar con cárcel a quienes realicen terapias de conversión anula la libertad en los ciudadanos de tomar decisiones acerca de su identidad.

Alejandro del Rey, pastor, aseguró que son miles de poblanos los que comparten la ideología que los padres son quienes tienen la prioridad de influenciar en la educación de sus hijos, afirmó que cada individuo es libre de creer y hacer lo que quiera de su vida y deben ser respetados.

Afirmó que quienes están a favor de esta propuesta son una minoría que no abarca ni la mitad del total de feministas, personas transgénero y de la comunidad LGBT que pertenecen a Puebla, por lo que desestiman la obligación de acatar este dictamen.

Guillermo Ortega, de la asociación Puebla por la Vida y la Familia, exhortó a los diputados a reconsiderar esta iniciativa, y proponer un nuevo proceso legislativo que proteja tanto a quienes están a favor de estas terapias, así como a quienes están en contra.

Posterior a la entrega de su posicionamiento ante el Congreso, manifestantes expresaron que se encuentran satisfechos con la atención que les brindaron, solicitando que de la misma manera sean atendidas sus solicitudes.

Aseguraron que, de no obtener respuesta por parte de las autoridades, tomarán medidas más estrictas para ser escuchados. “No fueran las chicas de verde porque ellas hasta cierran el congreso para las reciban, también nosotros podemos hacerlo, pero somos buenas personas” declaró uno de los participantes.