Organizaciones civiles a través de la Universidad Iberoamericana Puebla, exigieron a las autoridades vigilar el tránsito y cumplimiento de los derechos humanos de las personas migrantes, después de que una caravana con alrededor de 300 personas centroamericanas y sudamericanas, fueron amenazadas por personal del Instituto Nacional de Migración (INM).
La tarde de antier, el tren en el que viajaban los migrantes, entre ellos menores de edad, fue interceptado por personal del INM y la Guardia Nacional a la altura de Soltepec,Tlaxcala, después de transitar por territorio poblano. Desde ahí, los uniformados exigieron a las personas que buscan el “sueño americano” entregarse por las buenas, porque de lo contrario, los capturarían por las malas.
Ante esto, la Red Franciscana para Migrantes México, la Clínica Jurídica para Refugiados "Alaide Foppa" de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, la Red de Atención Integral a Migrantes, la Red Jesuita con Migrantes México y el Colectivo La Voz de los Desaparecidos Puebla, reprobaron los hechos ocurrido desde la tarde del 24 de mayo, hasta las primeras horas de la mañana del 25 de mayo.
También, pidieron urgente al INM, la GN, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Tlaxcala, garantizar la unidad familiar, el interés superior de la niñez, ofrecer ayuda humanitaria y vigilar el pleno respeto de los derechos humanos de las personas migrantes y documenten los hechos.
“Expresamos nuestra profunda preocupación porque estas personas sean detenidas y maltratadas por personal del INM y GN, incomunicadas, enviadas a un centro de detención en entidades del sur de México o bien expulsadas a sus países de origen sin la debida orientación jurídica ni apoyo humanitario”.
En el documento se expuso que, deportar a las personas a sus paises de origen las vulnera debido a que, han sufrido amenazas y violencia, condiciones que provocaron la movilidad humana de personas y familias, con el objetivo de buscar mejores condiciones.
“Sabemos que hechos tan graves como estos han ocurrido en otros lugares durante esta misma semana, como es el caso de lo sucedido en Apizaco con Ana Leticia Díaz Escamilla, madre buscadora hondureña en proceso de localización de su hijo desaparecido, Marco Antonio Díaz Escamilla”.