Con la recién aprobada reforma de supremacía constitucional, las y los diputados de Morena (que son mayoría en el Congreso de Puebla) podrán aprobar o crear cualquier ley, sin importar lo absurda, buena o mala que sea, y esta no será cuestionada ni refutada, advirtió Jonathan Carlos Amaro Hernández, abogado y académico de la Escuela Libre de Derecho de Puebla (ELDP).
Es decir, a partir de que entre en vigor la reforma en la entidad, también conocida como ley anti amparo, se borrarán los métodos de defensa ante cualquier arbitrariedad del Estado, señaló en entrevista con El Sol de Puebla.
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El especialista explicó que, por poner un ejemplo muy vago, si en el Congreso local crean una ley para expropiar todos los bienes que existen alrededor de las oficinas de gobierno, quienes habitan en esos lugares no van a poder ampararse para no perder su patrimonio, porque así lo marca la ley, y se tiene que acatar aunque los perjudique.
Esto no ha pasado, aclaró, pues hasta el momento los legisladores locales han sido mesurados con sus iniciativas. Sin embargo, es un ejemplo del poder absoluto que tiene el grupo parlamentario de Morena para cambiar o modificar las leyes en el estado, y también en el país, pues dicha reforma también fue avalada en las cámaras de Diputados y Senadores.
“Ya no se puede cuestionar ninguna ley, por buena o mala que sea, ya no se va a poder combatir, porque se hizo de acuerdo a lo que establece la Constitución, se siguió un procedimiento legislativo, se presentó ante las cámaras, fue discutida y aprobada, publicada en el Diario Oficial de la Federación y por lo tanto ya no hay vuelta atrás”, sostuvo.
Sin el afán de ser fatalista, el académico advirtió sobre el riesgo de la concentración del poder en un solo partido, pues este puede usar indebidamente la facultad que ahora posee. La ciudadanía está a la merced de que lo Morena decida, ya no hay contrapesos.
Dijo que si bien el país no está inmerso en una dictadura, es decir, donde no hay pluralismo político, con esta reforma empieza a tener tinta de ello.
También cuestionó el actuar de los diputados morenistas y si realmente todos los que han votado a favor de esta, y las demás reformas que presentó el expresidente Andrés Manuel López Obrador antes de dejar el cargo, están de acuerdo con ellas o conocen de qué tratan realmente, así como los impactos que generarán a nivel local y nacional.
“Considero que la reforma es inadecuada, y tal vez los legisladores no han dimensionado lo que implica, incluso, podría pensar que no saben ni qué es lo que están aprobando, parece ser que lo que están haciendo responde a un capricho de carácter político”, opinó.
¿Desapareció la oposición?
El papel de la oposición poco a poco se desvanece, pues aunque los legisladores de Morena han actuado de forma prudente, en cualquier momento, y con esta nueva reforma, pueden crear una nueva ley que imposibilite a sus opositores de participar en cualquier decisión, consideró.
El poder de Morena ahora es tan fuerte que, con un chasquido, puede borrar a los partidos de oposición, Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano, del escenario político del estado y el país.
“Si la oposición habla mal de ellos, diciendo que están cometiendo un delito en su contra, pueden iniciar un juicio de procedencia contra todos, eso lo pueden hacer, los juzgan y los meten a la cárcel, las normas que se creen en el Congreso, aún malas o con errores, serán válidas”, dijo como segundo ejemplo.
Con esto, no solo se pierden los medios de defensa de los derechos humanos de la ciudadanía, sino que se borra el sistema de pesos y contrapesos en el estado para evitar la concentración de poder, dijo. El ejemplo claro es que los legisladores de oposición son mínimos en el Congreso local y, pese a su rechazo a la reforma judicial, a la de supremacía constitucional y la reciente designación de la nueva titular de la Comisión de Derechos Humanos del estado de Puebla, su opinión poco valió en la decisión.
Por lo anterior, el académico hizo un llamado a la ciudadanía a informarse acerca de las decisiones del Legislativo, a cuestionarlas y aprender a involucrarse en la toma de decisiones de la misma, no solo a través del voto en jornadas electorales, sino también con su opinión.
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Cabe mencionar que, fue el pasado 31 de octubre, cuando el Congreso de Puebla aprobó con 34 votos a favor y seis en contra, la reforma de supremacía constitucional. Con ello, las reformas constitucionales no podrán ser impugnadas por la vía judicial en la entidad.